Ratificación de mandato
Muy lamentable éste ejercicio político que lanza la ola naranja en algunos de los municipios donde ejercen mandato. Sobre todo, en Guadalajara, donde comanda Enrique Alfaro Ramírez, porque implica un alto costo este ejercicio, que para lo único que va a servir es para darle el realce que Alfaro necesita para consolidar su futura candidatura a gobernador. Ese mismo proceso lo aplicó en Tlajomulco de Zúñiga, donde un cierto sector de la población votó para que continuara con, en ese entonces, su mandato municipal. Hoy, bajo la batuta del Consejo Municipal de Participación Ciudadana del Municipio de Guadalajara, que preside la “aflojerada” Margarita Sierra, prepara el circo denominado “ratificación de mandato”. Este proceso promocionado por el propio actor, no es otra cosa que el culto a su persona, con unos cuantos toques de soberbia y vanidad. ¿Cuál será el costo, no sólo político, sino económico, que traerá este acto? Este culto a la persona misma de Alfaro, no es otra cosa que una crónica anunciada de una aspiración más allá de un simple ejercicio democrático. En Guadalajara, aún dormimos, no hemos despertado, seguimos nuestro tren de vida dejando que nuestros impuestos se apliquen a enaltecer la soberbia y la vanidad de quien ya ostenta el poder y quiere más. Qué lamentable. Carlos Cortés Oyoque critican y que han sentado la base de su meteórica carrera en el señalamiento y crítica hacia los otros los que son diferentes a ellos, los que no son ciudadanos como ellos, más temprano que tarde caen en los mismos excesos y vicios que tanto condenan, y si me refiero al tema de la cabezota de Fors, ese Rukero perdón Rockero, que en los años noventa hiciera gala de irreverencia y buen Rock en Guadalajara y que hoy solo desgasta una formula vieja y nada propositiva en el aspecto musical, pero venido a mas en el aspecto de la artística plástica, y el problema no radica en lo que el líder de Cuca haga como artista, el problema radica en que el Alcalde de Guadalajara le acaba de regalar 4.5 millones de pesos para la realización de una escultura, y el problema no sería tampoco eso, si no se tratara de un regalo directo de un alcalde y de su sequito de seguidores y asesores quienes son amigos íntimos y mecenas conocidos de dicho artista, en el ámbito privado ellos podrán comprar y seguir subsidiando la obra de Fors pero no con dinero público, repito cuando se conoce que Alfaro y sus amigos o sea los líderes de MC son amigos íntimos y consumidores asiduos de la obra del cubano-tapatío, (o no, Weren y Rafa) saludos. Pedro Javier Silvestre Rocha