Genocidio, desapariciones de migrantes en México
Las desapariciones de personas migrantes, principalmente de Centroamérica, durante su tránsito por México, podrá ser calificado en el futuro de “genocidio”, sostuvo el padre Alejandro Solalinde, director del albergue Hermanos en el Camino.
“Cuando vengan gobiernos honestos que además dediquen presupuesto a esto (la búsqueda y localización de personas), quizá con ayuda internacional muy probablemente porque México no se va a dar abasto, nos vamos a asombrar. Vamos a estremecernos cuando veamos que lo que pasó realmente es un holocausto, es un genocidio. Lo que se hizo aquí es un genocidio con la comunidad centroamericana, con la comunidad migrante”, subrayó el presbítero.
El defensor de los derechos humanos de personas migrantes comentó que la cifra de desapa- recidos tras cruzar la frontera sur de nuestro país es de cientos de miles de personas. Varía entre 11 mil y 70 mil según organizaciones de madres en busca de sus hijos.
Añadió que “todo el país está sembrado” de cuerpos de personas no identificadas, en fosas comunes o en fosas clandestinas, entre quienes se encuentran cuerpos de personas con características de los migrantes, según ha recolectado en diversos testimonios, algunos de los cuales narró.
El sacerdote también alertó sobre el incremento de menores de edad migrantes, al citar que más de la tercera parte de los ‘aseguramientos’ de personas realizados por el Instituto Nacional de Migración son de niños y adolescentes: 58 de 126. “Estados Unidos y México no han logrado parar el flujo migratorio de ese rango de edad, de doce a 17 años de edad… Ellos son completamente vulnerables porque hay muchísimas agrupaciones delictivas del crimen organizado y del crimen autorizado… los pobres niños, los pobres adolescentes no acompañados, no tienen defensas”, apuntó, tras recordar que en 2014 el entonces presidente de los Estados Unidos Barak Obama reconoció esta crisis humanitaria, pero la respuesta de su gobierno fue más perjudicial.
De visita en Guadalajara, donde esta ocasión fue invitado como ponente en Urban Thinkers Campus, Solalinde propuso “reconocer a las personas migrantes como hermanos” y que la Iglesia y el Estado asuman la responsabilidad de darles ayuda humanitaria.