Cuatro años después
De haber estado en la ciudad, la agrupación impregnó de metal el BMLS Showcenter, donde reunieron a casi tres mil personas
Su anterior visita sucedió en 2013, en la última edición del Hell & Heaven en Guadalajara, desde entonces, el público tapatío esperaba su regreso. Con muchos cambios, pero con la misma actitud, In Flames regresó para llenar la noche de energía.
A las 20:00 horas la gente comenzó a ingresar al BMLS Showcenter, y 40 minutos después subió al escenario la banda abridora Cathleen, originarios de la Ciudad de México. Los asistentes estuvieron atentos al primer acto y como sucede casi como costumbre, en breve fueron contagiados por la energía que proyectaba la agrupación en el escenario.
El BMLS Showcenter recibió a la banda de metal a las 21:40 horas y de inmediato provocaron euforia entre los casi tres mil asistentes. Apenas iban un par de canciones cuando el vocalista Anders Friden tomó la bandera de México y se abrigó en ella como si fuese una capa. “¿Cómo se sienten? Estamos felices de estar en Guadalajara. Vaya me siento como un superhéroe portando esta bandera”, dijo de manera jocosa antes de interpretar “Trigger”.
Momentos antes del concierto, confesó que degustó unos tacos y esperaba no tener que salir del escenario inesperadamente. “Es que nuestros estómagos europeos no están acostumbrados a sus condimentos. Pero por eso desde allá inventamos el whiskey”, bromeó.
Las primeras líneas saltaron y corearon cuando escucharon el siguiente tema “Only for the weak”, aunque pasando a las últimas filas y llegando a las mesas y periqueras el público fue más contenido. En “Dead alone” la invitación fue para hacer el mosh pit.
La potencia de temas como “Darker times” y “Drifter” mantuvieron la energía a lo alto. El escenario fue sencillo, una manta tras ellos con In Flames en letras enormes, y un juego de luces que potenciaba los sonidos frenéticos que emanaba cada canción.
“Moonshield” fue una de las más celebradas, y algo que destacó en la selección de temas que interpretaron es la variedad de sonidos que han formado parte de su trayectoria, siempre con el metal como base.
“Muchas gracias. Esta noche tenemos buenas canciones. Es muy bueno estar de nuevo en Guadalajara, gracias por estar con nosotros y recordarnos”, agregó Anders antes de tomar un momento para presentar a la banda, quienes minutos antes resaltaron sus habilidades en fragmentos en solitario.
Otra de las favoritas, “Save me”, se escuchó enseguida y después “Alias”, que fue acompañada por palmas al aire durante el puente de la canción. “Empezamos haciendo esto hace mucho tiempo y estamos felices de poder seguir haciéndolo y poder seguir viajando alrededor del mundo a lugares como este. Y sé que a veces en internet escuchan comentarios. Pero sepan que sin ustedes como seguidores no habría industria, así que muchas gracias por escucharnos y les prometo que estaremos aquí hasta siempre”, agregaron. Eso justo para dar paso a “Here until forever” que marcó la hora del show. “The truth”, “Deliver us”, “The quiet place” fueron otros de los temas que dieron forma a un concierto enérgico que recompensó los cuatro años de espera para el regreso de los suecos.