Chivo expiatorio
La estrategia de campaña de Donald Trump fue tomar a México como chivo expiatorio: expulsar a los indocumentados, construir el muro y acabar con el TLC. Capricho e ignorancia, no acepta, ni le interesa saber los beneficios del tratado. ¿Cómo entender el tratado para los que no somos expertos? Desde 1994 que entró el vigor el TLC la industria azucarera ha sido el centro de los problemas comerciales entre México y Estados Unidos. La industria azucarera estadounidense obtuvo un tratamiento especial, catorce años limitaron las importaciones de azúcar de México, afectando la siembra de caña y hasta cerraron varios ingenios. La industria norteamericana se benefició de la protección gracias a la garantía del precio mediante límites a la importación. En 2008 México obtuvo acceso ilimitado al mercado estadunidense, en 2013 nuestro país obtuvo una cosecha abundante de azúcar, de nuevo limitaron las importaciones, como lo han hecho con el atún y el limón, demandaron por prácticas comerciales injustas. El hecho de que exista un forcejeo tan prolongado por un solo producto provoca incertidumbre, el gobierno de Trump quiere abrir varios frentes para volver a redactar el acuerdo y revisarlo cada cinco años. Nuestro país ha enviado a los mejores especialistas para negociar el tratado, ya se han reunido en los tres países y todavía no prende la luz verde. Trump ha cancelado en los hechos la relación bilateral que se había mantenido con la Casa Blanca desde hace 40 años. Trump quiere mostrar su poder, acabar con el tratado que hicieron sus antecesores y cumplir con su estrategia de campaña,
darle en la torre a México. Rosa Chávez Cárdenas