¡Repudiemos la violencia contra las mujeres!
L a ONU instituyó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La fecha se asumió como un homenaje simbólico a las hermanas Mirabal que, ese día de 1960, fueron asesinadas por el régimen del tirano Rafael Leónidas Trujillo en República Dominicana.
Minerva, Patria y María Teresa, conocidas como Las Mariposas, formaron un movimiento opositor a la dictadura. Fueron encarceladas, violadas y torturadas, pero a pesar de estos abusos bestiales no abandonaron su causa por la libertad y los derechos humanos. Sin embargo, en un accidente automovilístico fabricado finalmente perdieron la vida.
Sin duda, han sido largas, dolorosas e insuficientes las luchas emprendidas por mujeres ejemplares y diversas organizaciones feministas para hacer realidad el respeto a la dignidad humana de la mujer, transformar
modelos culturales machistas y patriarcales que la subordinan y generar ámbitos propicios para el desarrollo de sus potencialidades intelectuales, profesionales y espirituales...
Tan es así que entre los 17 objetivos de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible, el 5º se propuso: Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas
las mujeres y las niñas, pues se reconoce que ellas siguen sufriendo discriminación y violencia y dicha equidad no solo es un derecho fundamental, sino la base necesaria para conseguir un mundo pacífico, próspero y sostenible.
Los propios datos de la ONU alarman: de 2005 a 2016, en 87 países 19 por ciento de las mujeres de entre 15 y 49 años experimentaron violencia física o sexual de su pareja —lo cual puede acabar con la muerte—; en tanto que, en 2012, casi la mitad de mujeres víctimas de homicidio intencional en el orbe fueron asesi-
nadas por su compañero íntimo o un familiar, en comparación con 6 por ciento de los varones.
Y el mismo secretario general de la ONU recién expresó que: En todo el mundo una de cada tres mujeres sufre violencia en su vida, 750 millones fueron casadas antes de los 18 años y más de 250 millones han sufrido mutilación genital…
No menos aterrador es que la región de América Latina tiene las cifras más elevadas de feminicidios: diversas estimaciones calculan 15 víctimas diarias precisamente por ser mujeres.
Es tiempo de que todo ser humano de buena voluntad deje la pasividad, se pinte de
naranja y se sume al activismo para denunciar la violencia y propiciar la igualdad de género.
En esta colosal tarea nadie sobra y en la medida que podamos avanzar en esa misma construiremos mejores entornos de paz, de progreso y de cohesión social en nuestras comunidades. ¡Nunca más una mujer maltratada…!