UN QUÍMICO CON LAS LETRAS EN LA SANGRE
Aunque el escritor mexicano Óscar de Muriel lleva tres libros publicados de su serie de misterio y detectives en cinco idiomas, apenas este año debutó el primero en español: La sonata del diablo, una novela detectivesca ambientada en Escocia en el siglo XIX. “Es un dúo de detectives muy a la Watson y Sherlock Holmes. La idea se me ocurrió después de pasar unos siete años en Inglaterra a donde viajé para hacer un doctorado. Por diversas razones acabé trabajando medio tiempo, me encontré con muchos momentos libres y ganas de escribir. Fui hilando todas las circunstancias, tanto el ambiente escocés, la neblina, el frío, las calles empedradas que hay en Edimburgo y haber tocado el violín desde que era joven. Todo eso para hacer este primer caso de mis detectives Frey y McGray”.
Primero, el autor se dedicó a diseñar a los personajes. “Algo que me encanta de los libros es cuando los involucrados parecen ser de carne y hueso, que puedes saber lo que van a decir de manera honesta. Me encantó crear estos dos detectives diferentes entre sí. Frey es de la alta sociedad londinense y
Nueve uñas McGray es lo opuesto, escocés, con un temperamento diferente, pero un tanto parecido al latinoamericano.
“También me gustó ambientar la ciudad de Edimburgo, que es hermosa, sus callecitas empedradas, edificios construidos en 1200, donde la gente todavía vive y me parece que su atmósfera tiene misterio, melancolía y un poco de tristeza incluso”, puntualizó el escritor nacido en la Ciudad de México.
El autor de títulos como Las cuerdas del asesinato y Una fiebre de la sangre, reveló que siempre quiso ser escritor, aunque entró a estudiar ingeniería química “por accidente y por aquello de que uno tiene que comer y pagar las cuentas.
“Llegué a Inglaterra con una beca y siempre me dicen que lo de escritor no tiene que nada que ver con la química, pero para mí sí. Como químico sabes exactamente qué veneno usar para matar a tu personaje y no dejar rastro, por ejemplo”, señaló el .
En Escocia, La sonata del diablo tuvo mucho éxito, “la gente que vive en Edimburgo le gustó cómo se retrata la ciudad y la esencia de la gente; hay incluso una pequeña librería en la calle principal que vende el libro casi como guía para turistas, para que vean el castillo, la taberna y los edificios más importantes de la ciudad”, expresa orgulloso y en espera de que ahora los mexicanos se dejen atrapar por este misterioso crimen, que tan solo es el comienzo de una serie que plantea llegar a los nueve volúmenes.