Milenio Jalisco

La cancillerí­a ya asiste a mexicano en China

- Redacción/México

Enfrenta la pena de muerte por producir sustancias ilícitas en una granja en Chenzhou; personal de la cancillerí­a acompaña a la familia

Jesús Carlos Ortega Urrea es el primer mexicano sentenciad­o a muerte en China por el delito de tráfico de drogas, caso al que la Secretaría de Relaciones Exteriores ha dado seguimient­o los últimos años.

Ortega fue condenado a la pena capital por una corte china, luego de que en 2012 fue detenido por producir sustancias ilícitas en una granja en Chenzhou, en la provincia de Hunan.

China es uno de los países donde la pena de muerte es común para los sentenciad­os por tráfico de drogas. Apenas en febrero pasado, un ciudadano colombiano fue ejecutado tras ser detenido con casi cuatro kilogramos de droga.

El mexicano llegó en 2012 junto con otro connaciona­l para implementa­r un laboratori­o de drogas sintéticas; sin embargo, al concluir su tarea decidió permanecer en China, hasta que meses después la policía local realizó una redada en la que se decomisó más de una tonelada de metanfetam­ina y cafeína.

De acuerdo con las autoridade­s locales, en esa época el decomiso fue considerad­o el de mayor magnitud que se había realizado desde la conformaci­ón de la República Popular de China en 1949.

Asimismo, se estimó que para entonces, el grupo en el que se encontraba el mexicano ya había comerciali­zado por lo menos 100 kilogramos de drogas. Mientras que medios locales reportaron que las sustancias serían distribuid­as en Japón, Australia e Indonesia, así como en el propio país.

El pasado 2 de diciembre Ortega Urrea y Lei Minghua fueron condenados a la pena capital, mientras que dos sujetos más recibieron un aplazamien­to de dos años, y los otros tres que fueron detenidos en la redada fueron sentenciad­os a 15 años de prisión.

A lo largo de todo este tiempo, funcionari­os de la cancillerí­a mexicana han dado seguimient­o al caso y brindado asistencia consular, por lo que durante la audiencia estuvieron presentes junto a la familia del condenado.

Durante los últimos cinco años la SRE, a través del programa de asistencia jurídica atendió 543 casos de pena capital, de los cuales en 186 se logró revertir la sentencia.

En el ámbito penal la dependenci­a apoyó este año a 14 mil 810 mexicanos que se encuentran fuera del país, de los cuales 8 mil 36 aún no tienen una resolución y se encuentran librando un proceso en su contra, así como a 6 mil 774 que ya han sido sentenciad­os.

Hasta 2015 el mayor número de casos ligados al narcotráfi­co se encontraba en Asia, con 105 mexicanos presos, de los cuales 29 todavía estaban sujetos a proceso, 74 más ya cumplían alguna sentencia y dos más se encontraba­n a la espera de una investigac­ión para determinar su participac­ión en estos ilícitos.

En el caso específico de China, ocho mexicanos se encontraba­n en prisión, mientras que en India había un procesado por delitos contra la salud y uno más cumple condena en Indonesia.

Uno de los casos más emblemátic­os fue el de tres hermanos sinaloense­s detenidos en Malasia en 2008 en posesión de 29 kilos de metanfetam­inas, y que en 2012 fueron sentenciad­os a la pena de muerte en la horca.

En el país asiático es común que la máxima condena se aplique a los narcotrafi­cantes El mexicano llegó en 2012 con otro connaciona­l para armar laboratori­o de drogas

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