2017, el año con más atracos a la casa de estudios
Sin embargo, si la oferta disponible pertenece a otro centro universitario a donde el alumno hizo trámites, el interesado debe de acudir directamente al plantel.
En varios planteles regionales de nivel superior y bachillerato se registraron robos
El 2017 pasará a la historia como el año con mayores atracos a planteles de la Universidad de Guadalajara (UdeG), señaló su rector general, Tonatiuh Bravo Padilla, quien enumeró los robos sufridos en los centros universitarios de Tepatitlán y Ameca, así como en preparatorias regionales.
“Hace un año la universidad denunció los atracos que se hicieron contra el Centro Universitario de Los Altos, con el Centro Universitario de los Valles. Más tardamos en equipar los laboratorios que en que se presenten atracos de esta naturaleza”, apuntó el rector.
El problema ha crecido de forma exponencial, acotó. “Nosotros en los últimos quince años hemos tenido que ir invirtiendo cada vez más en el tema de seguridad privada; de tal manera que ya rebasan los 60 millones de pesos, la partida que utiliza la universidad para el simple resguardo de sus instalaciones con personal evidentemente no armado”, recordó el rector general.
Tras lamentar que este importante recurso no pueda destinarse a acciones educativas, Bravo Padilla refirió que el problema de inseguridad no es exclusivo de la institución, sino de todo el país. Reclamo que aparece y es citado en estudios y encuestas.
Si bien, reconoció que la molestia de la comunidad universitaria por la inseguridad padecida en las inmediaciones de los planteles, se hizo manifiesta luego del asesinato de Francisco Álvarez Quezada, estudiante de la preparatoria Tonalá, victimado en agosto pasado en Guadalajara, por robarle un celular a unas calles del CUCEI, donde el joven acudía a estudiar inglés.
A raíz de ello se hizo un convenio con la Fiscalía General para actuar en conjunto con las policías municipales para inhibir el delito en torno a los planteles de la UdeG, mencionó el rector.
“No pedimos un trato especial a la universidad, ni un trato diferenciado a sus estudiantes, aunque sí afirmamos y lo reiteramos aquí, los jóvenes en gran medida se están convirtiendo en blanco de los grupos de delincuentes que los atracan, los asaltan, los vejan… Y de manera muy particular a las mujeres”, resaltó. Respecto al acto vandálico que sufrió la Biblioteca Iberoamericana “Octavio Paz”, el pasado 29 de diciembre, Tonatiuh Bravo comentó que el patrimonio artístico no sufrió daños mayores. Además del incendio provocado, confirmó el robo de equipo de cómputo y del escáner que permitía convertir cualquier libro al lenguaje braille, para permitir que pudieran ser leídos por personas con ceguera. Un servicio único, dijo.
Anunció que a más tardar en cuatro meses estará de nueva cuenta en servicio la biblioteca, con todas las medidas de seguridad pertinentes.