Renovar tecnología, reto de las empresas
Stromasys es una firma de soluciones que ayuda a toda clase de compañías a modernizar sus sistemas de manera ágil, de modo que no pierdan productividad
Las empresas mexicanas y latinoamericanas atraviesan por un complicado proceso, dado que aunque sus equipos y sistemas tecnológicos aún sirven, saben que tienen que renovarlos a la brevedad; sin embargo, el reto es hacerlo de la manera más rápida para no perder productividad.
En entrevista con MILENIO, Roberto Ruiz, director general para Latinoamérica y el Caribe de Stromasys, compañía dedicada a modernizar sistemas empresariales, destacó que una de las características de las empresas de la región es que pasan muchos años antes de que renueven su tecnología, contrario a Estados Unidos, donde lo hacen cada tres años. “Ese es el caso de las aplicaciones de sistemas de Legado, como se conoce a los sistemas que tienen 20 años o más pero aún están en operación y solucionando problemas, el cliente no quiere modificar los ambientes, pero sí modernizarlos para que el beneficio de la tecnología moderna forme parte de sus iniciativas”, dijo Ruiz.
Destacó que en Latinoamérica algunos países están más adelantados que otros en el proceso de adopción digital, como es el caso de Brasil y México, son los líderes de la región, pues cuentan con muchas multinacionales para las que la modernización es vital; sin embargo, hay pequeñas y medianas empresas que deben migrar sus antiguos sistemas.
Para esas pequeñas y medianas empresas en América Latina, el tema de la nube, por ejemplo, ya no es una preocupación, ahora lo es conocer qué tanto se migrará a la nube de las aplicaciones, “para eso nosotros ayudamos a nuestros clientes, de modo que sepan cuáles aplicaciones Legado se moverán a un ambiente de nube”.
El directivo destacó que al modernizar sus viejos sistemas le permite a las empresas au- mentar su productividad y disminuir hasta 90 por ciento los costos de consumo de energía y hasta 85 por ciento el espacio requerido para albergar sus sistemas antiguos. “Incluso la virtualización de estos sistemas es benéfica en caso de desastres naturales, pues actualmente la adopción tecnológica pasó de ser un gasto necesario a una inversión benéfica y parte de un diferenciador competitivo, porque quienes no usan tecnología como un factor competitivo no se mantienen en el mercado”, comentó Ruíz.
Destacó que los sistemas heredados no son necesariamente los más glamurosos; una empresa que no moderniza sus sistemas puede presentar costos asociados a la inactividad, pues según un estudio de la consultora IDC, el impacto de fallas no planificadas puede representar hasta 2 mil millones de pesos por año.