Con 100 mdp refuerzan Mi Bici en L3 del Tren
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Entre los edificios y diversos negocios antiguos que visten diariamente a la perla tapatía; el cruce de las calles López Cotilla y Enrique González Martínez albergan a Radio Comercial Guadalajara (RCG), local que desde hace más setenta años abrió sus puertas para ofrecer la venta y reparación de equipos de bulbos.
La melancolía recorre cada uno de los estantes del negocio, donde: radios, cámaras, micrófonos y amplificadores dejan ver las marcas de una transición tecnológica mundial. A sus adentros, se puede distinguir la armoniosa música que disfruta el señor Óscar Vázquez, actual dueño del negocio.
Óscar relató, que el negocio fue fundado por su padre en 1946, principalmente bajo la venta de refacciones para radio y televisión; sin embargo, con el paso de los años, su padre decidió implementar la venta de refacciones para aparatos de bulbos tras su notable auge.
“Mi padre se dio cuenta de que casi no había personas que se dedicaran a la venta de estas refacciones, así que decidió implementar su venta sin dejar de lado lo que ya tenía. La venta de los bulbos tuvo un gran éxito alrededor de los ochenta cuando volvieron a fabricarse aparatos con estas características. Se llegaron a usar en aparatos médicos, el cine y la industria musical,” comentó
El dueño mencionó la actual soledad que se vive en este mercado, ya que muchas personas creen que los bulbos ya no se usan, pero al contrario, hay aparatos de reciente fabricación que los manejan. Dijo que “es muy triste ver que a pesar del tiempo que tenemos, las personas pasan por el local sin saber de qué es. Somos invisibles, casi como un edificio fantasma”.
Países soviéticos como: Rusia, Yugoslavia, Checoslovaquia, recuperaron un poco el mercado de los bulbos, tras crear este tipo de artefactos, en su mayoría amplifi- cadores, señaló Vázquez.
Entre el polvo, se pueden distinguir las cajas que guardan las variedades de bulbos, de las cuales, subraya Óscar, algunos tienen más de cuarenta años olvidados en los anaqueles.
“Los bulbos que tenemos fueron comprados entre los cincuenta y sesenta. Actualmente tenemos bulbos fabricados en Alemania, Rusia; excepto asiáticos. Estos son nuevos de fabricación antigua y se les denominan New Stock; los precios van de los 198 a los dos mil pesos, según sus características”, mencionó.
A pesar de que Vázquez afirmó que la venta de estos ya no es tan fluida, tiene la esperanza de continuar con su negocio por muchos años, pues aficionados y coleccionistas son sus visitantes más frecuentes. “Desconozco si somos o no el único negocio dedicado a esto de México, pero sé que seguimos aquí por querer mantener este tipo de servicios que ya no se encuentran. No se vive se su venta, más que nada es amor al arte”.
Agregó además que actualmente cuentan con venta en línea donde el extranjero es su principal mercado, por lo que tomaron la decisión de cerrar sus puertas y comenzar con atención especializada. “Ya solo trabajamos medio turno, de 10:00 a 16:00 y con previa cita para así tener una mejor atención a los interesados; además, creamos aparatos que usan bulbos. Creemos que ya no es necesario estar ubicados en el centro”.
Finalmente mencionó que el gobierno de Guadalajara quiso darles un reconocimiento por ser de los negocios más antiguos de la ciudad; sin embargo, no lo recibieron.
“Esperamos seguir aquí por años para que no muera este servicio. Es una muestra de nostalgia y me gusta hacerlo.”, concluyó.
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