Robo en oficinas
P or tercera ocasión en un lapso de ocho meses los dueños de lo ajeno entraron a robar en mi oficina. Se llevaron mi laptop donde tenía escrita la columna para hoy domingo. No obstante que esta es la tercera ocasión que los dueños de lo ajeno nos roban, hasta ahora decidí denunciar el asunto con la esperanza de recuperar lo robado. Independientemente del valor en pesos y centavos que significa el costo de nuestras herramientas de trabajo, el daño mayúsculo son los archivos guardados en nuestras computadoras.
Datos muy frescos realizados por el Observatorio Ciudadano Jalisco Cómo Vamos, destacan el incremento en la inseguridad, robos a casa habitación y robos a oficinas. En el apartado correspondiente a Estado de Derecho de dicho documento, se reportó que los delitos del fuero común sobrepasaron la meta planteada.
La cifra del incremento de delitos de esta naturaleza es muy alta, coincide con la percepción de los ciudadanos respecto al nivel de inseguridad que prevalece en la zona metropolitana de Guadalajara. Lejos de ponerle remedio a la situación, ésta se incrementa.
Se dice que las fuerzas policiacas de los municipios conurbados de Guadalajara conocen los perfiles y a estos delincuentes y las zonas donde operan, los detienen, y por razones atribuibles a que los expedientes no se “arman” correctamente, más tardan en meterlos a prisión que en dejarlos libres. Muchos de estos delincuentes entran y salen de la cárcel como Juan por su casa.
Como lo expresé al principio de este texto, es la tercera ocasión que nos roban en un lapso de ocho meses. La afectación económica que nos ocasionan robando nuestras computadoras es enorme, pero el daño de proporciones incalculables es la pérdida de los archivos guardados en ellas.
PD: no quiero dejar pasar la ocasión para comentar las repetidas incongruencias de AMLO: Incluir en su proyecto al nieto y yerno de Elba Esther, esa delincuente (delincuenta, diría Fox) que se hace llamar “la maestra”, cuesta trabajo creerlo, así como incorporar a Napoleón Gómez Urrutia, otro delincuente reconocido y al impresentable analfabeta Cuauhtémoc Blanco. Para completar el póker de ases solo falta que invite a Romero Deschamps; y para integrar la quintilla, posiblemente decida incluir a Gamboa Patrón. Pago por ver.
Bien dicen que el principal enemigo de López Obrador es López Obrador.