Graue: la vigilancia armada no es opción para la UNAM
Mancera ofrece que trabajarán con la institución para capturar a todos los criminales en ese campus; procuraduría investiga si mancha de sangre en uno de los detenidos era de víctimas
La escalada de violencia alcanzó límites inaceptables, pero una vigilancia armada no es ni será opción en la UNAM, subrayó el rector, Enrique Graue.
En un mensaje para referirse a los hechos violentos en campus universitarios, que dejaron una profesora herida y dos personas muertas, el rector señaló que los narcomenudistas se han dispersado por CU.
Ante el cuerpo de directores reunido en la Torre de Rectoría, Graue exigió a las autoridades que realicen una exhaustiva investigación que conduzca al esclarecimiento de los hechos y a la detención de los responsables de la balacera del viernes pasado en CU y del asalto a la profesora de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, que ocurrió la noche del jueves.
Afirmó que la Universidad está lastimada e indignada por estos lamentables sucesos, y advirtió que “en los días y semanas por venir escucharemos voces, internas y externas, que clamarán por otras alternativas más agresivas, algunas que quisieran vernos o armados o militarizados. Y no pocas aprovecharán los momentos políticos electorales que vivimos en nuestra nación para intentar desestabilizarnos”.
Sin embargo, dejó en claro que “Vivir constantemente en un estado de vigilancia armada nunca fue, ni será, una opción a ser considerada”.
El rector consideró que balaceras como la del viernes “pueden ser consecuencia de las medidas implantadas por la Rectoría a fin de combatir el narcomenudeo en nuestras instalaciones”, como la colocación de rejas en las zonas conocidas como Los Frontones y Los Bigotes, que son los espacios donde los “narcomenudistas se habían asentado”. Al señalar que esos grupos se han dispersado por CU, llamó a los jóvenes a que se alejen de aquellos que distribuyen drogas, “que entiendan que ellos viven mundos ajenos a los nuestros, que no son sus amigos y que representan relaciones de peligro e inseguridad”.
Pidió a la comunidad académica y administrativa su solidaridad para denunciar todo evento que presuman “sospechoso o potencialmente peligros para nuestra seguridad”, además de que estén cerca de los jóvenes y sirvan de ejemplo para su desarrollo integral.
“La Universidad, desde hace ya años, no había sufrido actos de violencia entre grupos de narcomenudeo y es muy doloroso que los hayamos vuelto a experimentar”, agregó.
Graue lamentó el fallecimiento de los dos hombres, quienes no eran universitarios, porque “a fin de cuentas, su muerte es el producto de la desesperanza en la que está envuelta una parte de nuestra juventud”. Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno de Ciudad de México, aseguró que su administración mantendrá la coordinación con la UNAM para detener a quienes realicen actividades delictivas en CU. Subrayó que la autoridad no ingresará al campus por ser una zona federal y respetar la autonomía de la máxima casa de estudios.
Afirmó que lo que pasó en CU fue un pleito directo entre los involucrados aunque todavía no se tiene claro el móvil, y llamó a tener una ley más severa contra la portación de armas.
En el acto, Edmundo Garrido, procurador capitalino, dio a conocer que uno de los detenidos por la balacera en CU tenía una mancha de sangre en la ropa, la cual es analizada para determinar si es de alguno de los fallecidos.m