Bloqueo de Trump entierra oferta hostil por Qualcomm
Broadcom retira de la mesa 142 mil mdd
Sector corporativo de EU se encuentra conmocionado por la medida presidencial, que se suma a los aranceles al aluminio y acero ya anunciados
Ayer Broadcom retiró la oferta de 142 mil millones de dólares para comprar Qualcomm, dos días después de que el presidente Donald Trump bloqueó la búsqueda del fabricante de chips registrado en Singapur para comprar a su rival, al citar preocupaciones de seguridad nacional.
La medida, si bien esperada, puso un punto final a una de las luchas por una adquisición hostil más amargas y complejas en la historia reciente, que hubiera podido conducir al acuerdo de tecnología más grande de la historia.
La retirada de Broadcom se precipitó por la decisión de Trump de matar la transacción después de que funcionarios de seguridad nacional de Washington advirtieron que un acuerdo ayudaría a China a superar a Estados Unidos en la carrera para desarrollar la tecnología crítica de 5G.
La medida sin precedentes de Trump de bloquear un trato incluso antes de que se llegara a un acuerdo causó conmoción en todo el sector corporativo de Estados Unidos, que teme que el presidente utilice la seguridad nacional para promover sus políticas proteccionistas.
En las últimas semanas, Trump utilizó todo su poder para promover su política “Estados Unidos Primero”, ya que también impuso aranceles a las importaciones de acero y aluminio, una medida que busca proteger al sector de fabricación y los empleos de su país, y perjudicar a las empresas extranjeras.
El Comité de Inversión Extranjera de Estados Unidos (Cfius, por su sigla en inglés), un comité de interagencias del gobierno que analiza las adquisiciones extranjeras, aconsejó al presidente anular el acuerdo después de que determinó que si Broadcom compraba Qualcomm podría reducir la inversión a largo plazo de la empresa estadunidense en investigación y desarrollo.
Siguiendo el consejo de Cfius, Trump dijo que había “evidencia creíble” para creer que después de la compra de Qualcomm, Broadcom podría “tomar medidas que pudieran amenazar con perjudicar la seguridad nacional de Estados Unidos”.
A pesar de admitir su derrota, Broadcom dijo que seguiría adelante con su plan de trasladar su base oficial de Singapur a Estados Unidos, una condición que acordó con el gobierno estadunidense el año pasado para cerrar una transacción diferente de semiconductores.
“Aunque nos decepciona este resultado, Broadcom cumplirá con la orden”, dijo la compañía en un comunicado, y agregó que sostendrá una reunión especial de accionistas el 23 de marzo.
La decisión de Broadcom de abandonar la lucha después de casi cinco meses de gran drama es una gran victoria para la dirección de Qualcomm, que se opuso ferozmente a la combinación.