Al ritmo de Gimme the power, protestan contra desaparecidos
Reciben tratamiento psicológico y piden apoyo a la Policía cuando graban en locaciones, revela la comunidad académica del CAAV
Que se sienta el power mexicano, que se sienta todos juntos como hermanos, porque somos más, jalamos más parejo, por qué estar siguiendo a una bola de pen…”, cantaban a todo pulmón la canción Gimme the power, del grupo Molotov, los cerca de 200 jóvenes que participaron en la tocada realizada en la glorieta a los Niños Héroes, para recordar a las personas desaparecidas.
Fue una protesta diferente, una protesta que enchinaba la piel, una protesta que sacó la emoción y sentimiento de los jóvenes, una protesta que movió las entrañas de los asistentes con música, con canciones de protesta por la desaparición de Salomón, Marcos y Daniel.
En la tocada participaron alrededor de 30 músicos, estudiantes de distintas carreras de la Universidad de Guadalajara, Iteso, del CAAV y de otras escuelas que se sumaron a la convocatoria realizada por redes sociales.
“La convocatoria fue abierta, me llegó por un amigo que también es músico igual y nos fuimos compartiendo por redes sociales, la convocatoria fue abierta a quienes quisieran venir, a quienes trajeran sus instrumentos”, comentó Isabel Malacara, una de las participantes.
El evento fue grabado a ocho cámaras colocada en distintos puntos de la glorieta, incluso, se empleó un dron para captar imágenes aéreas.
Con las imágenes se realizará un video que será exhibido en redes sociales, incluso la agrupación de rock Molotov, promoverá la grabación en su página oficial.
Carlos Valencia, profesor de cine y fotografía de la Universidad de Medios Audiovisuales dijo, “la idea de esto es sensibilizar a los jóvenes del grave problema que representan los desaparecidos, pensamos que son tácticas de miedo que hacen los delincuentes”, señaló.
El “toquín” comenzó a las 19:30 y finalizó a las 20:20 horas. Avenida Niños Héroes sufrió afectaciones a la circulación, a pesar de todo, no se reportaron incidentes.
Carlos Valencia, catedrático del CAAV, reveló que, tras la desaparición de Salomón, Marcos y Daniel, los alumnos de la escuela de cine, ahora reciben tratamiento psicológico para afrontar de mejor manera el incidente.
Incluso, han requerido la intervención de la Policía para que los estudiantes realicen grabaciones en zonas alejadas de la metrópoli, ante el temor de ser víctimas de la delincuencia como lo fueron sus tres compañeros desaparecidos.