Llevarán a CIDH caso de los 3 desaparecidos
Más de 2 mil 500 personas marcharon; Rubén Albarrán, de Café Tacvba, se sumó al contingente y cantó en honor de las víctimas
La Federación de Estudiantes Universitarios plantea presentar una queja ante Comisión Interamericana Inconformes consideran inconsistentes las conclusiones del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses Rubén Albarrán, de Café Tacvba, protestó; aparte, ejidatarios se manifestaron por impago
Este viernes es cumpleaños de César Alejandro Miramontes Vargas y no lo pudo celebrar al lado de sus familiares. Su mamá, María de los Ángeles, y su hermano Joel salieron a marchar a las calles de Guadalajara para exigir justicia, pues desde el 9 de abril pasado nada saben de él.
El cumpleaños 34 de César fue diferente. El 9 de abril pasado fue la última ocasión que supieron de él, cuando habría ido a cobrar un dinero al mediodía a la avenida Alcalde, entre Manuel Acuña y Herrera y Cairo. Lo último que dijeron es que iba a tomar el transporte público para dirigirse a su casa.
“Yo le digo al perro de él ‘ahorita viene’, voltea el perro muy triste y me dice que no con la cabeza, y se agarra llorando el perro, como que él presiente que ya no va a volver, no sé, pero yo quisiera encontrarlo como pudiera encontrarlo, pero no han encontrado nada, nadie nos da razón de él”, cuenta María de los Ángeles.
Ellos dos se acompañaron de más de dos mil 500 personas, de acuerdo con Protección Civil de Guadalajara, que marcharon en silencio por avenida Chapultepec en la capital jalisciense. El contingente marchó en silencio, caminaban familiares de mujeres y hombres que integran la lista de más de tres mil personas desaparecidas en Jalisco, entidad que ocupa el tercer sitio a nivel nacional.
Los participantes se fueron vestidos de blanco: al frente las madres, que ya no pueden celebrar el 10 de mayo porque les arrebataron a alguno de sus hijos. Caminaban en silencio y en sus manos cargaban lonas con foto, nombre e información de su desaparecido.
En la marcha para recordar a los ausentes, se tocó el tema de los tres estudiantes de cine desaparecidos: Salomón, Jesús y Marco. Ante las inconsistencias que se han reportado en la investigación del caso y las declaraciones hechas por Luis Octavio Cotero, director del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) plantea a las familias de los tres jóvenes la presentación de una queja ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Estamos a la espera, seguramente la próxima semana ya tendremos noticias de parte de ellos (la familia), ellos quedaron de valorar la situación y yo los vi muy convencidos de seguir la lucha, eso se los puedo asegurar”, dijo Jesús Medina, presidente de la FEU.
El recorrido inició en la Plaza de la República, luego tomó avenida Chapultepec con rumbo a la Glorieta de los Niños Héroes, ahora nombrada como la Glorieta de Las y Los Desaparecidos. El contingente se detuvo antes de cruzar avenida Hidalgo. A la marcha se unió Rubén Albarrán, vocalista de la banda Café Tacvba y quien se ha caracterizado por participar en luchas sociales.
El cantante sacó una sonaja que comenzó a hacer sonar en representación a la sangre de las personas, los jóvenes, las mujeres, los abuelos... También prendió salvia seca que representa los buenos pensamientos y cuidado para los niños, niñas y jóvenes.
“Ese sufrimiento, esa energía que viene de las madres, pues es medicina para toda nuestra sociedad porque seguir apuntando con el dedo no nos va a llevar nada”, dijo en entrevista a los medios de comunicación.
Las madres, hermanos, hermanas, hijos, hijas, estudiantes, ciudadanos, colectivos marcharon en silencio. Pasaron por lo bares de la zona que ya lucían llenos por ser viernes. Los clientes de los establecimientos volteaban a ver la marcha en silencio mientras la música de reggeatón o de banda continuaba.
La marcha concluyó en la glorieta, se llevó a cabo un minuto de silencio y ahí inició un memorial musical. Rubén cantó: “a veces pienso que tú nunca vendrás, pero te quiero y te tengo que esperar, es el destino, me lleva hasta el final donde algún día mi amor te encontrará”.
Posteriormente cantó “1,2,3”, canción de Café Tacvba que hace mención a las personas desaparecidas: “cómo te pido que no seas una más de las historias que se cuentan a diario, no quiero que seas sólo un número más, cómo es posible que alguien quiera y pueda desearlo”, se escuchó en Guadalajara.