Susana Casillas gana con Madre Tierra
e visto con interés, todos y cada uno de los episodios de la serie: Clandestino producida por TV 44 el canal de la Universidad de Guadalajara.
Es una serie dividida en trece capítulos, en los que participan los protagonistas de aquella historia citadina a través de su propio testimonio.
Es un documento que califico de extraordinario, acerca de la historia moderna de los movimientos armados. Sumamente convincente desde la perspectiva de la metodología histórica.
Por supuesto que tengo una visión particular, ya que por mi edad y paso por la ex Facultad de arquitectura y antes, la escuela secundaria N° 1, viví esa etapa oscura de la vida tapatía.
Bien dice El Monaguillo, Sergio Aguayo ahora doctorado por el Colegio de México y con postgrado en los Estado Unidos, verdades veredes Sancho. Los jóvenes del oriente siempre estuvieron relegados, los de oriente, la estirpe, siempre privilegiados, prepotentes y protegidos por castas. [Zuno, González Gallo, García Barragán, Leaño y Margarito Ramírez].
El productor Pablo Valadez. Dice: Recupera la historia de un grupo de jóvenes que conformaron los grupos guerrilleros en Guadalajara. Pandilleros en principio, idealistas revolucionarios posteriormente. Herederos del movimiento estudiantil de 1968, en busca de la democratización del país.
A Roberto Sosa. Conductor, por momentos le vence la pasión y parece hacer una apología de los hechos. En mi opinión, no fueron ni héroes ni bandidos sino producto de las circunstancias, obligados por las circunstancias y el momento histórico, congruentes con su realidad [La guerra fría, Vietnam, la revolución cubana, los movimientos radicales sudamericanos, El Che Guevara, los tupamaros uruguayos, montoneros argentinos el MIR chileno y otras inspiraciones]. Y ante todo, la desigualdad social, la lucha de clases. Ahora la motivación de los jóvenes marginales, es; voltear hacia los cárteles de la delincuencia organizada. Lamentablemente.
El proceso de producción duró dos años. Las personas involucradas, se atrevieron a dar la cara y denunciar la represión policiaca y militar de ese momento.
A cuarenta años de distancia, la visión es más objetiva, menos oscurantista. Conozco literatura escrita al respecto: La Charola, del propio Sergio Aguayo Quezada, editado por Grijalbo, La Fuga de Oblatos de Antonio Orozco Michel, editado por La Casa del Mago Hermenegildo Holguín, Canuteros de Plomo de Juan Manuel Negrete [Premio Jalisco de Literatura]. Editado por Porrúa y Guadalajara una guerrilla olvidada del ingeniero Guillermo Robles Garnica editado por Hermenegildo Holguín en Casa del Mago. Así como la tesina de licenciatura LIGA COMUNISTA 23 DE SEPTIEMBRE realizada por José Ángel Escamilla Rodríguez de la UAM, Iztapalapa, julio de 2013.
En lo estrictamente televisivo, fluye de manera ágil, lo que lo hace interesante e ilustrativo.
Los testimonios son muy conmovedores, sobre todo los de las mujeres guerrilleras y el judicial.
La pieza de la artista muestra la fusión del rostro de una mujer y las pencas del agave
El jurado calificador del Premio Nacional de Pintura del IV Festival del Agave 2018 otorgó el primer lugar, de entre cincuenta participantes, a la composición Madre Tierra, de la jalisciense Susana Casillas, quien, en su haber, cuenta con una trayectoria de varias exposiciones colectivas e individuales, así como intervenciones pictóricas para artistas como Carlos Santana y subastas a beneficencia.
Madre Tierra fusiona el rostro de una mujer y las pencas del agave; “siempre me han gustado esas dualidades, qué mejor representación que el rostro de una mujer que proyecta tanta fuerza y este emblema de la entidad para representar la vida terrenal y la vida espiritual, un concepto que me gusta; la pieza ya se vendió y la técnica es acrílica sobre tela”, explicó.
Para la artista “este premio es una inyección de entusiasmo… Me siento muy emocionada, estuve participando con 49 artistas, conmigo son cincuenta y la verdad es que es una motivación más para seguir adelante y representar a Jalisco fuera del país, y nada, muy contenta y quiero que la gente sepa que hago mi trabajo con mucho corazón”.
Casillas comenzó a pintar desde niña: “Tengo más de 300 piezas, he realizado muchos retratos de artistas, luego elaboré un cuadro donde enfatizaba el labial en un rostro con tonos muy vivos y fue el primer cuadro que vendí a muy buen precio. Aunque desde pequeña he tenido gusto por los colores, las acuarelas, los óleos, fue hace cuatro años aproximadamente que comencé mi carrera profesional; he expuesto en Estados Unidos, China y, próximamente, el 5 de julio, tengo una exposición en Barcelona. También en febrero pasado participé en Amarte, Arte Incluyente, una subasta en el Musa en la que todo lo recaudado se destinó al CRIT”, dijo.