No vamos a bajar la guardia: vecinos de Arboledas del Sur
Han sido días tensos para los vecinos del predio de bosque urbano de Arboledas del Sur que se mantiene en disputa legal entre ellos, el ayuntamiento de Guadalajara y una inmobiliaria. A pesar de haber obtenido una suspensión de plano a favor de la comunidad indígena de Santa María Tequepexpan, propietarios de las tierras, los colonos señalan que la autoridad municipal continúa vigilando el espacio verde y que incluso continúa trabajando en el mismo, por lo que afirman que no bajarán la guardia ni desistirán en su defensa.
Este domingo decenas de vecinos y defensores del terreno se congregaron en el mismo. El olor a pino y la frescura que traen consigo los cientos de grandes árboles que allí se asientan atrajo también a niños que jugaban en el área y familias que allí pasaban la tarde. Sobre el asfalto, metros arriba del espacio, una patrulla de la policía municipal vigilante iba y venía.
Por separado, el Ayuntamiento de Guadalajara afirmó que detrás de la protesta están intereses partidistas, y señaló a la candidata de Morena a la alcaldía, Claudia Delgadillo, como la responsable de generar el clima adverso al proyecto municipal.
“Ni la constructora, ni la policía, ni el Ayuntamiento han querido respetar la suspensión. Ellos siguen haciendo obras, siguen destruyéndonos nuestros árboles. No han dejado de trabajar”, lamenta Sagrario a propósito de la presencia policíaca en la zona, ella estuvo ayer también cuando se vivió uno de los tantos momentos ríspidos con la autoridad por la defensa del espacio.
Sagrario recuerda cómo el mismo día 7 de junio que el Primer Tribunal Colegiado les otorgó la suspensión, ella y otro grupo de vecinos y defensores les informaron sobre la misma a quienes estaban en el predio y fueron ignorados.
“Nos venimos nosotros corriendo a traerles la noticia y todo, y ellos no quisieron aceptarla. Eso quería decir que se retirara ya la constructora de aquí, se retirara ayuntamiento de aquí, y no quisieron. Es fecha que no han querido”, señala.
A pesar de esta omisión que señalan, los vecinos afirman que no bajarán la guardia y continuarán con su resistencia civil pacífica por el terreno, uno que han cuidado, cultivado y deforestado por años, y que no dejarán se pierda por lo que llaman “un capricho de la autoridad”.
“Tenemos robles, pinos, jacarandas, tabachines… es un pulmón para toda la ciudad, no nada más para las colonias aledañas. Y es lo que estamos queriendo defender de la voracidad de las autoridades municipales”, resaltan.
Otros, son menos optimistas sobre el estado que guarda el predio de 2.5 hectáreas y su futuro, y aceptan que el hecho de que se quiera construir sobre él “está mal, pero con el gobierno no puede uno”.