Mota para todos ya
Ayer, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió el amparo en Revisión 623/2018 y declaró inconstitucionales diversos artículos de la Ley General de Salud en todo lo relacionado con el consumo de mariguana.
La resolución, con base en el proyecto del ministro José Ramón Cossío, ordena a la Secretaría de Salud emitir autorizaciones para realizar las actividades relacionadas con el consumo personal de cannabis con fines lúdicos o recreativos —adquirir la semilla, sembrar, cultivar, cosechar, preparar, poseer y transportar.
La sentencia no permite realizar actos de comercio, suministro, venta o distribución de cannabis. No debe perjudicar a terceros, por lo que no está autorizado el consumo de esta sustancia en lugares públicos. Hoy solo faltan dos sentencias más, en el mismo sentido, para generar jurisprudencia y entonces tener una declaratoria general de inconstitucionalidad.
El gobierno, en particular la Secretaría de Salud, tiene hoy dos caminos: o darse por vencidos en esta visión conservadora, absurda, de seguir insistiendo en castigar el consumo lúdico de la mariguana y poniendo todos los obstáculos para la medicinal, y por lo tanto esperarse a dos resoluciones más de la Suprema Corte y entonces ser obligados a hacerlo, o controlar el proceso desde la institución de manera ordenada.
La Corte ha mandado ya el mensaje con claridad: tres de tres. Serán cinco de cinco.
Esto va a suceder, como seguirá sucediendo en los estados de la Unión Americana.
La Corte enmarca el asunto como uno de derechos humanos, pero si el gobierno y el Congreso se tomaran en serio el asunto, podría tener impactos reales en asuntos de seguridad. Para empezar, no tendríamos, como hoy sucede en todo el país, a policías perdiendo el tiempo molestando a quien se da un toque y después ocupando espacio necesario para asuntos que importan en ministerios públicos y en muchos casos, hasta acaban en la prisión porque, aunque el puro consumo no es delito, la posesión sí, y pues de ahí se agarran. Solo por liberar esos recursos para perseguir crímenes de verdad valdría la pena.
Quedan unos meses a este gobierno. Las encuestas dicen que será castigado por los electores el próximo 1 de julio.
A veces, son los mejores momentos para hacer cosas, cosas que cambian vidas, que construyen.