Marina acepta medidas cautelares de la CNDH
La Secretaría de Marina aceptó dar cumplimiento a las medidas cautelares emitidas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), relacionadas con la desaparición de 28 personas en Nuevo Laredo, Tamaulipas, entre febrero y mayo del presente año. La dependencia naval informó que como parte de lo solicitado por el organismo, el 1 de junio pasado ordenó “concentrar en Ciudad de México” (sin estar suspendidos) al personal que se encontraba en las bases de operaciones de la región norte de Tamaulipas y Nuevo León.
Lo anterior para que el personal esté disponible ante aquellas autoridades que así lo requieran, con el fin de que realicen las diligencias conducentes y resuelvan lo que a derecho corresponda.
La Semar garantizó que los funcionarios a los que se compruebe que hayan participado en estos sucesos serán “suspendidos o apartados temporalmente de cualquier tarea o función que pudiese interferir con la efectiva investigación de los hechos y la búsqueda de las personas desaparecidas o que pudieran poner en riesgo a las familias de las víctimas, testigos o defensores de los agraviados”.
La institución castrense señaló que busca a las personas desaparecidas con la participación de los familiares; por ello se autorizó que personal de la CNDH, en compañía de agentes de la PGR y de la procuraduría estatal, inspeccionen las bases de Tamaulipas y Nuevo León.
También se instruyó a los mandos de la primera región naval en Tamaulipas y a la unidad de operaciones especiales, así como de cualquiera que desarrolle actividades en la citada entidad a que, en caso de localizar a las personas desaparecidas o algún cuerpo sin vida, informen de forma inmediata y pongan a disposición de la autoridad correspondiente.
Pidió al personal naval abstenerse de violar los derechos humanos y cumplir con las medidas dictadas por la CNDH. A los elementos desplegados en Tamaulipas solicitó continuar de manera congruente con las citadas instrucciones.
En mayo pasado, la Oficina en México del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos documentó la desaparición.
De acuerdo con el organismo, las desapariciones habrían sido durante la noche o madrugada por fuerzas federales, lo que ameritó que la CNDH emitiera la recomendación.