Amat reconoce la presión de dirigir la serie Narcos
El cineasta Amat Escalante aceptó que dirigir algunos capítulos de la cuarta temporada de la serie Narcos, en la que la trama se centra en los grandes capos mexicanos, le significó una gran presión, ya por primera vez abrazó un proyecto en el que no escribió el guion, por lo que consideró que su participación fue un giro de 180 grados en su carrera. “Fue un cambio radical para mí, de un momento a otro trabajé con todos los actores mexicanos posibles y de muy alto nivel, además internacionales, estaba Michael Peña, además de Diego Luna, como protagonistas. El interés de Narcos y Netflix no es exponer la problemática de México, es entretener con una serie de humor y drama”, aseguró a ¡hey!
Para el realizador, este proyecto muestra el hecho de que al público y realizadores “desde los inicios del cine nos ha gustado el crimen y en una sociedad como México, donde está tan logrado con nuestro gobierno, tiene cierta relevancia más allá del entretenimiento; así la verán los mexicanos, pero la mayoría del público que la verá será del mundo y hay que tenerlo en mente”.
Amat acepta esta oportunidad por su interés en el pasado, ahora de estos grupos que se formaron en los 70: “Me gusta la idea de ver cómo eran las cosas antes, me [ Amat Escalante formó parte del foro Resguardo de Archivo Fílmico en el contexto del Guanajuato International Film Festival. [ “Es algo relevante, cercano a mi experiencia como cineasta, llevo cuatro películas y estoy en el proceso de ver cómo hacer para mantenerlas para el futuro”, expresó. daban guiones hechos, fui parte de una maquinaria, entré aportando mis conocimientos como director, visualicé las escenas y dirigí a los actores. “Hice lo mejor que pude bajo cierta presión que no había tenido antes, en mis películas la tenía, pero no como esta; de repente, fue dejarse ir, haciendo lo que sé, estamos muy contentos con los episodios de la serie”, dijo.
El teatro Juárez se puso de pie cuando Tenoch Huerta y Verónica Langer anunciaron la presencia de Damián Alcázar en el escenario para recibir la Cruz de Plata, el máximo galardón del Guanajuato International Film Festival (GIFF), y la medalla de plata, hecho del nitrato de plata recuperado de la filmina de los rollos de 35 milímetros de la Filmoteca de la UNAM. “Damián, esta Cruz de Plata la hemos entregado juntos, pero esta noche la entregamos con particular fe, eres una gran inspiración, hay muchos jóvenes en el cine, actores y directores por ti, porque nos inspiras todos los días, te queremos”, expresó entre lágrimas Sarah Hoch, presidente del GIFF.
Visiblemente emocionado, Alcázar, con voz quebrada, dedicó ambos reconocimientos a su hijo y aprovechó el momento para agradecer la oportunidad de haber filmado 70 películas, en 38 años de carrera. “Tiene que ver con mis compañeros, todos los personajes son un reflejo de los mexicanos, tenemos la posibilidad de tener un mejor país, trabajemos juntos todos”, dijo.
Como parte de su emotivo discurso, el actor afirmó que existen algunos temas urgentes por resolver en esta nación y dedicar también el esfuerzo por la cultura y el cine. “Estamos desesperados en el país, necesitamos regresar a la paz, la armonía, somos gente maravillosa, aunque nuestros valores están en detrimento, justo por la corrupción y los grandes lujos que se ha dado la clase política.
“Hay prioridades, pero la cultura y la educación deben ser prioridad en nuestros niños, para que en 12 años más, sigan entendiendo que hay que votar por la mejor opción de la democracia (…) Es una pena no poder ver cine de calidad en nuestro país, no tiene sentido, tenemos que conseguir salas para ver películas del mundo y el nuestro que es maravilloso”, finalizó el actor.