Tres de cada diez presos en Jalisco son reincidentes
Los datos se dieron a conocer en la primera Encuesta de Población Privada de la Libertad realizada por el Inegi
La entidad está por encima de la media nacional por cinco puntos porcentuales
El robo en todas sus categorías es la principal causa por la que son sentenciados
Las personas privadas de su libertad en su mayoría son entre los 18 y 39 años
Lograr una completa reinserción social de los presos, principal objetivo de un centro penitenciario, es una tarea pendiente en Jalisco, entidad en la que tres de cada diez sentenciados son reincidentes, es decir, después de pagar una condena deciden delinquir de nueva cuenta, en algunos casos hasta de manera inmediata aun y cuando su expectativa es reincorporarse a la vida social y laboral.
Así lo dio a conocer la Primera Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), estudio que tiene como propósito “generar información estadística sobre la experiencia del procedimiento penal e internamiento de la población privada de la libertad de 18 años y más”, así como sus características sociodemográficas y socioeconómicas, antecedentes jurídico-penales y sus expectativas de salida.
El documento genera datos obtenidos al considerar por primera ocasión a la población privada legalmente de su libertad, lo que ayuda a establecer algunos parámetros e indicadores del sistema penitenciario en nuestro país y cada entidad.
Uno de los temas de mayor relevancia ha sido la reinserción social, pues la tercera parte de los delincuentes, más tardan en conseguir su libertad, que en volver a estar tras las rejas, pues de acuerdo a datos de la encuesta elaborada por el Inegi, el modelo implementado en los reclusorios para procurar que las personas que cometieron un delito puedan incorporarse de manera productiva y apegada a la legalidad, luego de que cumplieran condena, no es del todo exitoso, al menos, los datos indican que no logra el cometido que persigue.
Según los datos presentados por el Inegi, el 31.1 por ciento de la población privada legalmente de la libertad, ya había sido juzgada de manera previa por relacionársele con algún delito, dato que supera la media nacional del 25.9 por ciento, mientras que de este número, un 30.2 por ciento, son personas que ya habían estado recluidas en un centro penitenciario y cumplieron su sentencia.
El dato anterior contrasta con la expectativa de reinserción que mostraron tener los presos, pues de acuerdo a esta encuesta, el 94.4 de las personas privadas legalmente de la libertad en Jalisco, consideró que podrían tener reinserción laboral una vez que concluyeran su condena, mientras que el 34.6, consideró que podría reincorporarse de manera activa y útil a la sociedad.
Sobre los delitos que llevan a las personas a pagar una condena, el estudio indica que el robo en todas su categorías, como robo a casa habitación, transeúnte, automóvil o de otra índole, es la principal causa por la que los sentenciados se encuentran recluidos en las prisiones de Jalisco, señala esta encuesta, pero además, es la principal causa por la cual se convierten en reincidentes, “el 62.4 por ciento de la población privada de la libertad en Jalisco con antecedentes penales, fue sentenciada por el delito de robo la última vez que fue juzgada penalmente. El 13.2 por ciento había sido procesada por posesión ilegal de drogas”.
En Jalisco, las personas privadas de su libertad por el cumplimiento de una condena, pertenecen en su mayoría a un rango de edad entre los 18 y 39 años, con un 70.1 por ciento con respecto a la población total, pero además, la encuesta ha permitido identificar que una de las constantes en torno a las detenciones es el grado de estudios, pues 7.5 de cada diez presos, solo cursaron el nivel básico de educación, es decir, primaria y, o secundaria.