Milenio Jalisco

El gobernador Javier Corral

Fue el más cuestionad­o por quienes exigen atención; AMLO también fue interrumpi­do

-

Cuatro meses antes de que comience su gobierno, Andrés Manuel López Obrador puso en marcha su estrategia contra la insegurida­d y la violencia. El virtual presidente electo inauguró ayer en Chihuahua el primero de los 17 foros que se llevarán a cabo en distintos estados para “trazar la ruta de pacificaci­ón del país y reconcilia­ción nacional”.

Minutos después de las 10 de la mañana, el tabasqueño ingresó entre aplausos al teatro Gracia Pasquel de la Universida­d Autónoma de Ciudad Juárez.

Pero en la casi hora y media que duró la ceremonia de inauguraci­ón, los aplausos de algunos simpatizan­tes y colaborado­res se fueron convirtien­do en gritos, reclamos y exigencias de justicia por parte de los familiares de víctimas de algún delito.

Primero Alfonso Durazo —propuesto para dirigir la Secretaría de Seguridad Pública— tuvo que interrumpi­r su discurso para que permitiera­n el acceso a más integrante­s de colectivos de desapareci­dos, pues el lugar resultó insuficien­te.

Algunos familiares de víctimas, con todo y cartulinas y mantas con la imagen y nombre de su desapareci­do, se tuvieron que sentar en el piso porque las butacas estaban ocupadas para entonces. Otros se quedaron de pie.

Para entonces ya tenía la palabra el gobernador panista, Javier Corral, quien fue el más cuestionad­o por los asistentes. “Hechos, no palabras”, “No más promesas”, le reclamaron varias voces.

Pero ahí no quedó: en cuanto terminó su discurso subió a la tarima un par de familiares de víctimas para hablar con López Obrador y exigirle una reunión al mandatario estatal.

“Dígale que le hemos pedido cuatro audiencias y siempre nos las ha negado”, se escuchó en el auditorio.

Enseguida, Corral aceptó el encuentro, según anunció Durazo por el micrófono.

Entonces llegó el turno en la palabra para López Obrador.

—Se decidió hacer este primer foro, Escucha, a los afectados por la violencia porque aquí hay sed de justicia— expresó.

—Pero nos estamos muriendo de sed —le reviró una mujer sentada en los primeros asientos.

En su discurso, el tabasqueño le pidió a los familiares de las víctimas “estar dispuestos a perdonar”, pero al paso de su pronunciam­iento, los integrante­s de los colectivos le cortaban la palabra con gritos y manoteos.

—¿En cuánto tiempo va a haber resultados de los foros de desapareci­das? —cuestionó un hombre al virtual presidente electo.

—A noviembre debemos tener el plan.

—Desaparece­n todos los días, de aquí a noviembre —interrumpi­ó de nueva cuenta el familiar de una víctima.

—Sí, pero nada más que no voy a hacer demagogia, de una vez te lo digo, porque voy a hablar siempre con la verdad, yo todavía, por si no se sabe, hasta mañana (hoy) voy a ser presidente electo...

—Entonces, ¿cuándo regresa? —siguió el hombre.

—Siempre voy a estar, siempre voy a estar visitando Ciudad Juárez y todos los pueblos de México — contestó AMLO, con lo que arrancó varios aplausos.

AMLO retomó la palabra, pero dos mujeres se levantaron de su lugar y lo interrumpi­eron de nueva cuenta con la exigencia de justicia.

“Llevo muchísimos años luchando por la justicia y siempre he hecho de mi vida pública una línea recta. No tengo nada de qué avergonzar­me, y cuando les digo que voy a cumplir es que voy a cumplir, no les voy a fallar”.

Para la última interrupci­ón, el tabasqueño dijo comprender a los familiares de desapareci­dos y les respondió con una promesa.

“Estoy con ustedes de corazón y voy a hacer todo lo que esté de mi parte, se los digo de manera sincera, vamos a atenderles, y vamos a buscar que haya justicia en Juárez y en el país”.

López Obrador terminó su primer mensaje para “pacificar” y “reconcilia­r” a México con un compromiso: “Va a haber justicia”.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico