Netanyahu defiende ley sobre “Estado judío”
El premier argumenta a favor de la polémica norma tras la marcha en su contra compuesta por 30 mil personas
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, defendió la ley de Estado Nación sobre la identidad judía del país, tras la manifestación convocada ayer en Tel Aviv por la minoría árabe-israelí, muchos de cuyos participantes enarbolaron banderas palestinas. “No hay mejor evidencia de la necesidad de una ley nacional”, afirmó Netanyahu en un mensaje en su cuenta de Twitter que acompañó de un video de participantes en la manifestación que portaban banderas palestinas.
Flanqueado por la bandera de Israel, Netahyahu afirmó: “Continuaremos ondeando nuestra bandera y cantando Hatikva (el himno nacional) con gran orgullo”.
Según la televisión pública israelí, la manifestación congregó a más de 30 mil personas, que respondieron a la iniciativa de organizaciones que representan a la minoría árabe-israelí, que constituye 17.5 por ciento de la población.
Los árabes-israelíes son los descendientes de los palestinos que permanecieron en sus tierras tras la creación del Estado de Israel en 1948.
La manifestación comenzó en la plaza Rabin de Tel Aviv bajo el lema “Abolir la Ley Estado Nación - Sí a la igualdad” y en la que se calificó la normativa de “apartheid” y “discriminatoria”. Aunque los organizaciones habían pedido no llevar banderas se podía ver gran número de enseñas palestinas y algunas israelíes. La manifestación se celebra una semana después de que los drusos convocaran en el mismo lugar una protesta contra la ley en la que participaron más de 90 mil personas. Para las minorías drusas y árabes, la ley los convierte en ciudadanos de segunda clase.
La ley que votó el parlamento el 19 de julio con el apoyo de Netanyahu confiere a los judíos el derecho “único” a la autodeterminación en Israel y proclama que el hebreo es la única lengua oficial de dicho país, mientras que el árabe tendrá un estatuto “especial” que no fue definido.
Ningún artículo menciona la igualdad entre los ciudadanos o el carácter democrático del país, haciendo temer que el aspecto judío de Israel prime sobre los demás principios.
Este texto preocupa especialmente a las minorías ya que el documento forma parte de las leyes fundamentales que funcionan a modo de Constitución de Israel.
La legislación ha generado polémica en el exterior y, en el país, entre las minorías, los grupos de izquierda, el mundo académico y cultural y el propio presidente del Estado de Israel, Reuvén Rivlin.
Los descendientes de los palestinos son 17.5 por ciento de la población de Israel