Reclaman atención a enfermos renales y sanear los ríos
Contabilizan 600 personas con algún daño en Mezcala, San Pedro Itzicán y Agua Caliente
Pobladores de varias comunidades de la ribera del Lago de Chapala, entre ellos los afectados de San Pedro Itzicán, alzaron la voz para demandar el saneamiento del Río LermaSantiago, el Lago de Chapala y la laguna de Cajititlán; así como las presas Valencia, Las Pintas, del Ahogado y canales de la cuenca.
En la Plaza de la Liberación, los vecinos encendieron velas en memoria de sus seres queridos que han fallecido víctimas de la contaminación que envenena los cuerpos líquidos, se esparce en el ambiente y ha acabado con manantiales de aguas termales. Ahí ofrecieron una conferencia de prensa para luego reunirse con funcionarios de Asuntos del Interior de la Secretaría General de Gobierno, de la Secretaría de Salud y de la Secretaría del Medio Ambiente, a quienes presentaron su pliego de demandas.
“Venimos a exigir la atención a los enfermos, en primer lugar, y el saneamiento de aguas. Al mismo tiempo se deben estar limpiando los ríos de Jalisco y no olvidarse de los ya afectados por la contaminación”, dijo Enrique Lira, presidente del Foro Socioambiental Guadalajara.
Para el activista se ha avanzado muy poco en los compromisos del tratamiento de aguas residuales que exige la ley y una macrorrecomendación de Derechos Humanos, instancia a la que también elevaron su queja. “Es corrupción, no se explica por otra cosa. Si el (Río) Santiago está como está, algo pasa. Turbio como su agua”, denunció.
En cuanto a los enfermos renales, padecimiento crónico que asocian a la contaminación del agua, aire y subsuelo, Lira pre- cisó que el listado “con nombres y domicilios es de 600 afectados entre Mezcala, San Pedro Itzicán y Agua Caliente”, comunidades ribereñas de Poncitlán. Sin embargo, alrededor de la laguna se estima que hay otros 8 mil casos registrados, dijo citando al doctor Héctor David Navarrete Ambriz.
Como en otras ocasiones, los presentes denunciaron los fallecimientos por daño renal. En este caso, las muertes de los hermanos Francisco y Rodolfo de los Santos, de 44 y 22 años de edad, ocurridas el 1 de abril y el 15 de julio pasado respectivamente. Los representantes de la comunidad indígena de Atotonilquillo también se manifestaron. Demandaron el saneamiento del canal de Atequiza, que nace en la presa derivadora Corona y llega a Las Pintitas de donde sus aguas pasan a las plantas de tratamiento y, ya ‘saneadas’ (lo ponen en duda), abastecen a Guadalajara, detalló Ramón Padilla Chávez, vecino.
Soledad Lomelí, secretaria de la comunidad indígena de Atotonilquillo, denunció que es insoportable el fétido olor que despide el citado canal, contaminado como el resto de la cuenca Lerma-ChapalaSantiago de la cual forma parte.
“No sé qué pasa, en el día no apesta tanto; en las noches, tenemos que cerrar las ventanas por la pestilencia que siente”, señaló.
De la reunión efectuada en el Palacio de Gobierno se acordó una reunión con el titular de la Secretaría de Salud, para el próximo lunes; así como un recorrido por el corredor de Atotonilquillo-Atequiza en fecha posterior, al que asistirán autoridades de la Conagua y de las secretarías del gobierno estatal.