Aston Martin arrancará en la Bolsa de Londres
El fabricante de autos de lujo británico da inicio a una nueva era de buenos resultados luego de que se ha declarado siete veces en quiebra
Aston Martin anunció sus planes de empezar a cotizar este año en la Bolsa de Valores de Londres después de un conjunto de resultados de medio año en el que el fabricante británico de automóviles de lujo registró ventas y utilidades que alcanzaron niveles récord.
La decisión de la salida a bolsa, que se produce después de siete trimestres consecutivos de rentabilidad, marca la conclusión de un plan de cambio de rumbo para la histórica empresa que se declaró en bancarrota siete veces. Se espera que la compañía reciba una valoración de alrededor de 5 mil millones de libras en la oferta pública inicial, de acuerdo con personas familiarizadas con los planes. “Este es un momento colosal”, dijo Andy Palmer, su director ejecutivo, a Financial Times. “Cuando comencé en 1979 había muchas empresas automotrices británicas. En el transcurso de mi carrera éstas fueron desapareciendo. La fabricación de automóviles en Reino Unido está en un buen estado, pero las empresas son de propiedad extranjera. Ahora vamos a tener una compañía automotriz británica independiente una vez más”.
La empresa dijo que los ingresos subieron 8 por ciento para llegar a 449.9 millones de libras en los primeros meses de este año, mientras que las utilidades antes de impuestos subieron de 20.1 millones de libras a 20.8 millones de libras, impulsadas por el lanzamiento de tres nuevos automóviles deportivos y la creciente demanda en Asia.
Una vez que se eliminan los costos de las acciones preferentes y otras medidas, las utilidades antes de impuestos subieron a 42 millones de libras, y la compañía registró un margen de utilidad de 24 por ciento.
Al menos 25 por ciento de sus acciones empezará a cotizar en su salida a bolsa, que se tiene programada para finales de este año, en un movimiento que le permitirá a la automotriz entrar al FTSE 100 si la valoración de la compañía es lo suficientemente alta.
Los patrocinadores actuales de Aston, el grupo italiano Investindustrial y el fondo de inversión de Kuwait, Investment Dar, venderán algunas acciones, mientras que Daimler, compañía propietaria de 4.9 por ciento de Aston y que tiene un acuerdo de intercambio de tecnología con la empresa, permanecerá como accionista.
El número de automóviles que se vendieron en el primer semestre cayó de 2 mil 439 unidades, en el mismo periodo de seis meses del año anterior, a 2 mil 299 vehículos, debido al lanzamiento de tres nuevos modelos: el DB 11 Volante, el DB11 AMR y el Vantage.
Aston Martin también comenzará la producción de su modelo regular de la gama más alta, el DBS, en el siguiente trimestre.
Proyecta vender entre 6 mil 200 y 6 mil 400 vehículos este año, y aumentar esa cifra a entre 7 mil 100 y 7 mil 300 el próximo año y alcanzar ventas de 9 mil 800 vehículos en el año 2020, cuando su nueva planta en Gales comience su producción.
En el largo plazo, la empresa estima fabricar hasta 14 mil vehículos al año, entre su marca Aston Martin como en su nueva marca Lagonda que la compañía volverá a lanzar como una marca de vehículos eléctricos de lujo.
El grupo también tratará de reequilibrar sus ventas globales, para tener una menor dependencia de Reino Unido, que actualmente representa 30 por ciento de colocaciones, y aumentar su presencia en Asia, donde proyecta un aumento de 16 a más de 25 por ciento de las ventas, impulsadas por su vehículo utilitario deportivo (SUV) que saldrá al mercado en 2020.
Palmer dijo que la compañía va a trasladar cualquier arancel en el que se incurra en Estados Unidos, que amenazó con aplicar tarifas punitivas a los automóviles que se exportan desde la Unión Europea.
Palmer dijo: “Si se aplican aranceles y si no hay excepciones para los fabricantes de bajo volumen, entonces no se considera eso como un desastre, porque todos los fabricantes de vehículos de lujo son europeos y, no puedo hablar por nuestros competidores pero, vamos a trasladar eso hacia el cliente”.
También dijo que la compañía, que compra gran parte de sus componentes a la Unión Europea, se muestra resistente a las amenazas del brexit. El negocio se ve limitado por el suministro, lo que permite “elegir a qué mercados entrar”.
La producción esperada de este año ya “está totalmente vendida”, con pedidos que abarcan hasta el próximo año, agregó.
La decisión de lanzar su OPI, luego de siete trimestres consecutivos de rentabilidad
“Tendremos de nuevo una firma automotriz británica independiente”, apunta el director