Fiesta, baile y emoción con Sebastián Yatra y Paty Cantú
Ambos cantaron a los tapatíos sus éxitos y llenaron de energía el Auditorio Telmex
Una explosión de géneros y sensualidad se vivió anoche en el Auditorio Telmex con las voces de Sebastián Yatra y Paty Cantú, quienes unieron fuerzas por primera vez en un escenario para deleitar a más de 5 mil tapatíos con su mejor repertorio, bailes e invitados especiales.
El clan Yatra/Cantú anunció su llegada después de que el cantante tapatío Jorge Blanco saliera a escena para ejecutar un acto de apertura a ritmo pop. El también actor se retiró agradecido pues su público paisano aplaudió con euforia sus temas.
La expectativa crecía minuto a minuto pero finalmente las luces se apagaron en punto de las 9:25 de la noche y las más de 5 mil personas reaccionaron con gritos y aplausos, pues sabían que era momento de la fiesta.
El escenario se pintó de rojo y trajo los beats de “Sutra”, provocando una histeria femenina por la salida de Yatra al escenario. Y así fue, el colombiano se adueñó de la tarima y de inmediato bajó del escenario para saludar a sus fanáticos “¿Cómo estamos Guadalajara?” dijo antes de terminar su canción y quitarse la chaqueta.
Así continuó “Suena el dembow” y su pegajoso estribillo fue suficiente para que todos los presentes se contagiaran de la energía del intérprete.
La modesta escenografía que constó de una pantalla gigante y tarimas LED permitió que el originario de Medellín se robara el corazón de las tapatías. Sus movimientos y la intensidad de su interpretación hizo que la noche comenzara a velocidad turbo, al menos hasta que el cantante se tomó un minuto para hablar con el público.
“No saben la alegría que siento Guadalajara; hace cuatro años visitamos su hermosa ciudad y ahora estamos en el Telmex en frente de 5 mil almas, historias, corazones... les dedicó este tema a todas las personas que han amado a otro ser humano con todo su corazón y que por alguna razón ya no la tienen a su lado” dijo para después descubrir su abdomen y cantar a todo pulmón “Devuélveme el corazón”.
Tras un ágil cambio de vestuario, Yatra regresó para robarse los últimos suspiros de los tapatíos. El cantante lució un saco de espejos simulando una bola de disco y vislumbró el recinto mientras interpretaba “Cómo mirarte”
La emoción se elevó al 200% cuando el colombiano presentó a los venezolanos Mau & Ricky, quienes arribaron al escenario para cantar junto a Yatra el tema “Ya no tiene novio”
“¿Cómo están Guadalajara? Esta canción que sigue que les vamos a cantar mientras Yatra hace pipí se llama “Mi mala” dijo Ricky antes del tema.
Entonces regresó Yatra con playera nueva y charló con los hombres presentes; después de elogiarse como caballeroso, fiel y detallista, dio pie para el encore de su show con “Por perro”.
El calor dentro de la sala hizo que Yatra se deshiciera de su playera -otra vez- y habló a pecho desnudo luego de firmar la misma y arrojarla al público. Después se reincorporó con otra camisa y enamoró una vez más con “No hay nadie más” en medio de un firmamento lleno de luces.
Luego de una hora llena de energía, música, baile y sensualidad, Sebastián Yatra despidió su set con una explosiva interpretación de “Traicionera” y “Robarte un beso”.
El auditorio se encendió y con ello una cuenta regresiva de diez minutos. Entre tonos rosas y púrpuras, Paty Cantú salió al finalizar el conteo sentada en un trono piramidal en medio de una gran ovación.
La tapatía emergió en su trono pasadas las 10 con “Cuervo”, “Rompo contigo” y “No fue suficiente”. Vestida en un atuendo galáctico, la cantante se dispuso a entregar el espectáculo de su gira #333.
“¿Cómo está mi tierra mojada Guadalajara? Que emoción estar en mi tierra Guadalajara” saludó la cantante para continuar con su espectáculo.
Con 5 mil personas a sus pies, Paty demostró su simpatía magnética y lo hizo oficial con “Goma de mascar” y “Afortunadamente no eres tú”.
Su enérgico show culminó con las memorables actuaciones de “Suerte”, “Corazón Bipolar”, “Valiente” y “Natural”, dejando exhaustos a los tapatíos que disfrutaron de más de dos horas de espectáculo.