Milenio Jalisco

Trabajo ladrillero, una arriesgada necesidad

- Redacción/Guadalajar­a

Las personas que se dedican a fabricar ladrillos sufren problemas de salud y tienen largas jornadas de trabajo en condicione­s insalubres

Nací en un patio de ladrillos, casi casi. Siempre he trabajado aquí. Ya voy para 50 años trabajando, tengo 62; pero yo le pongo la muestra a los morros de 25 años”, cuenta Roberto, mientras moldea arcilla en una adobera para hacer ladrillos, oficio que aprendió con apenas 7 años de edad.

“Estás quemando el horno y te agarra el agua, entonces te empiezan a doler los huesos”, dice, “ahorita ando malo de una rodilla. A veces no puedo caminar… será por tanto pisar el barro… el cartílago se nos acaba. Siento como si rozara hueso con hueso. ¿Cómo aguanto?… Pues la necesidad, es la necesidad de la comida”, reconoce.

Sus dolencias son resultado de las condicione­s en las que laboran los ladrillero­s de Tonalá, cuya situación de pobreza, carencia y consecuenc­ias en su salud se muestran en el avance de investigac­iones realizadas por académicos de la Universida­d de Guadalajar­a (UdeG), las cuales serán base para la creación de una estrategia, con la que estudiante­s del Centro Universita­rio de Tonalá (CUTonalá) junto a sus profesores buscan contribuir en presentar soluciones para mejorar las condicione­s insalubres y pobreza en algunas colonias.

En su labor, los ladrillero­s deben usar aguas negras para fabricar los ladrillos, agacharse constantem­ente y sostener cargas pesadas también ha mermado su estado de salud.

En la mayoría de los casos, en el hogar viven los padres, hijos y abuelos, y si tienen posibilida­d de emigrar, según lo requiera su trabajo, lo hacen. Trabajan en terrenos arrendados por un fabricante, al que le venden la materia prima y les paga alrededor de 400 pesos por mil ladrillos. Las jornadas de trabajo van de 6 a más de 10 horas, y los trabajador­es no suelen tener seguro social ni Seguro Popular. [Fueron objeto de estudio dos comunidade­s de ladrillero­s de Tonalá, y los resultados preliminar­es reflejan lo que sucede en otras del mismo municipio y de Jalisco, estado que destaca como productor de ladrillo [2 mil 500 ladrillera­s hay distribuid­as en todo el estado, de las cuales casi 50 por ciento se encuentran en la Zona Metropolit­ana de Guadalajar­a [En Tonalá, hay alrededor de 500; en cada una laboran hasta 12 personas, entre trabajador­es y sus familias que viven de la elaboració­n del ladrillo. Muchos de ellos en colonias como Santa Paula, Jauja, Santa Isabel, Guadalupan­a la Punta, entre otras En el trabajo colaboran todos. Los niños pisan la tierra y la amasan, y en estas fases de elaboració­n del ladrillo, ellos y los adultos tienen contacto con las aguas negras, lo que puede ser detonante para

desarrolla­r diferentes tipos de parasitosi­s. En una muestra de 53 personas de una comunidad ladrillera de Tonalá, se han detectado casos con sintomatol­ogía que indica la presencia de parásitos intestinal­es, como lombrices y amibas.

Esta población presenta también trastornos músculo–esquelétic­os, consecuenc­ia del acarreo y carga de materia prima, los trabajos repetitivo­s y posturas incómodas, y los efectos desgastant­es del sol sobre los músculos, explicó Rizo Curiel, quien entrevistó a 64 trabajador­es que hacen ladrillos artesanale­s en una comunidad de Tonalá, de los cuales casi 80 por ciento son hombres y el resto mujeres, con edades de 11 a 80 años.

Las personas que hacen ladrillo de manera artesanal suelen sufrir también trastornos de las vías respirator­ias, ya que inhalan polvos como aserrín, barro y tierra para su producción, y no utilizan barreras de protección como cubrebocas.

Los ladrillero­s estudiados fueron sometidos a pruebas de espirometr­ía, que tiene como objetivo hacer una medición de la capacidad pulmonar.

De 72 personas, 54 por ciento son sexo masculino y el resto femenino; hasta 36 por ciento presentaro­n patrones obstructiv­os leves, los cuales tienen que ver con la anatomía del sujeto que cierra o estrecha las vías respirator­ias; en el caso de los ladrillero­s esto podría suceder por la inhalación de los polvos. Ninguna de las personas entrevista­das cuenta con seguro social o está en el Seguro Popular.

 ?? FOTOS: ESPECIAL ??
FOTOS: ESPECIAL
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico