Una ciudad ejemplar
El próximo domingo se dará el cambio de poder en Guadalajara. Sería la segunda administración bajo los colores naranjas de Movimiento Ciudadano.
Referéndum o arrastre del próximo gobernador, el gobierno que comenzará el 30 tendrá retos que, por falta de tiempo o estrategia distinta o fallida, no se lograron en los tres años de alfarismo en la ciudad.
La seguridad debe de ser puesta en el foco. Cierto, al igual que la relación con el gobierno de Aristóteles Sandoval, el éxito de Del Toro estará ligado a los resultados óptimos que logre Alfaro. No obstante, Ismael tiene que buscar caminos donde la confianza hacia el gendarme de a pie se propague. No solo la confianza, sino también respeto. En una época donde los dineros no alcanzan, la seguridad aumentará cuando el ciudadano que rompa la regla crea en su cumplimiento aún en la ausencia de la autoridad.
En eso también entra la movilidad metropolitana. Guadalajara y municipios aledaños se parecen día a día a la capital.
Difícil cambiar una inercia donde los autos están por encima del transporte público y el peatón solo por una cuestión de estatus más que de necesidad. La creación de sistemas colectivos de movilidad ha sido lenta y torpe en la capital jalisciense. Encontrar camiones óptimos es cada día más complicado, el tren ligero será aún insuficiente pese a la inauguración de la línea tres y los servicios de taxis -Uber incluidoson, dos a día, una opción más adecuada. A eso, agreguen el sistema de ciclovías que es pobre para la idea de combatir contaminación y tráfico con opciones diversas.
Temas hay muchos -cultura, empleo, educación, salud, ambulantajepero quisiera acabar con uno que importa de forma sustancial: convivencia ciudadana.
Nada funciona si la ciudadanía es apática o reaccionaria. Horas antes de la toma de posición de Ismael del Toro, un suceso en una casa de estudios recuerda lo fundamental que es la lucha por la libertad de expresión y, sobre todo, por los desechos de todos
Curioso que una universidad cediera a las amenazas de grupos reaccionarios de forma tan rápida, tanto como su revire para revivir un foro que hablaría del derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo.
Anécdota que hace reflexionar sobre las tensiones ideológicas existentes en la ciudad, más allá de aquellas que parecen tan obvias.