El siguiente paso, aún sin definir
Ya suman 6 mil 200 indocumentados en la capital, que hoy harán otra asamblea para decidir cómo procederán.
Dicen que la sábila limpia el ambiente y aleja las malas energías. Por eso Rubén Albarrán, vocalista de Café Tacvba, le prendió fuego a una de esas plantas en el albergue migrante en Ciudad de México.
Mientras lo hacía, Rubén, en cuclillas, celebró en pleno estadio Jesús Palillo Martínez a los “caminantes”, como se refirió a los miles de centroamericanos.
“Bravo por los caminantes, por su valentía, por su fortaleza. No hay seres humanos que sean ilegales”, exclamó.
Para entonces, él y Emmanuel del Real, Me me, otro de los ta cubos,ya se habían echado el primer
palo mazo con“O lita de alta mar ”: apenas necesita ron una guitarra y varios chiflidos.
Antes de terminar su ritual, Albarrán, de playera sin mangas y con su morral al hombro, pidió por los “caminantes”.
“Por todas las personas que están en movimiento, que estén con bien, que sean bienvenidos adonde han decidido llegar, que los obstáculos se disuelvan, que todos los niños estén contentos, que coman bien, algo nutritivo, que puedan comer unos frijolitos”.
Para entonces pasaban de las 4 de la tarde en la ciudad deportiva de la Magdalena Mixhuca, Albarrán y Meme ya habían recorrido una parte de este campamento para darle la “bienvenida” a esta caravana migrante.
A su paso, algunas personas, principalmente trabajadores del gobierno de Ciudad de México que los veían pasar tarareaban parte de canciones como “Ingrata” y “Eres”.
Pero para cerrar, los integrantes de Café Tacvba decidieron interpretar “Flores”:
“Invítame a sentarme junto a ti. Escucharé todos tus sueños y déjame estrechar tus manos y regalarte unas pocas de ilusiones”...
Y afuera
Los alrededores de la Magdalena Mixhuca se han convertido en otros espacios de convivencia para los centroamericanos.
Desde temprana hora empieza el trajín entre las puertas 6 y 7 del estadio. Hombres, mujeres, niños salen y acuden a los negocios aledaños. Quienes tienen algo de dinero compran refrescos, tacos u otros alimentos que no les proporcionan en el albergue, incluidas bebidas alcohólicas.
Situación que en algunos casos ha incomodado a negocios, principalmente a los de abarrotes y vinaterías. Si bien son beneficiados con el consumo, después de un rato pueden padecer el estado inconveniente de quienes se embriagan.
“Nosotros tenemos que parar la venta de alcohol porque cuandocomienzan a beber demasiado se ponen violentos y nos amenazan porno vender les ”, explica Miriam, dueña de una tienda.
A pesar del operativo de seguridad montado por la Secretaría de Seguridad en las inmediaciones, existen conductas que solo observan a la distancia..