El Unicornio en el Café Libertad
Recientemente conocí a un tipo que se empeñaba en escribir mal y discutía en defensa de su estilo errático. Algo parecido pasó en España hace 30 años cuando se impuso por la fuerza una manera de escribir una poética anticuada, inverosímil y que sólo aportaba sombras en medio de un desierto. Aquello se extendió como un incendio devorador y casi lo quemó todo. Me refiero a los años 90, en que el neorrealismo se consolidaba con la ayuda de críticos y de periódicos. Hasta que surgieron los unicornios,
que eran poetas de varias generaciones, aunque predominaban los jóvenes que iniciaron su obra en los años 80, que decidieron gritar en defensa de la buena poesía para denunciar las malas artes que se estaban practicando, apoyadas incomprensiblemente por varias editoriales que por aquella época comenzaron a abrirse camino. Contra la poesía figurativa o de la nueva sentimentalidad: plana, confusa, nada iluminadora y con un matiz clónico, trató de darse a conocer una poesía de la libertad, iluminada, sin corsés ni ataduras. A aquel movimiento –jamás tendencia- se denominó poesía de la Diferencia. Para reivindicar los valores de una poesía libre y sin ceñimientos, donde aún cabía la originalidad y diversas estéticas, se reunió un gran colectivo de poetas en el Café Libertad de Madrid el 27 de marzo de 1993, con la asistencia de poetas libres de varias generaciones. El eco en los periódicos fue descomunal. Algo importante pasó en la calle Libertad 8: música, poesía, copas, alegría festiva que reivindicaba un mundo poético soberano y sin corsés. Aquella fiesta de la poesía libertaria, estética, de extraordinaria belleza, se extendió a otros lugares de España, como el segundo acto celebrado en la Posada del Potro de Córdoba el 13 de noviembre de ese mismo año, y por último hubo un tercero en el Ateneo de Sevilla el 15 de abril de 1994. Lo que significó todo aquello lo ha publicado estos días el crítico, profesor y poeta Pedro Rodríguez Pacheco bajo el título “El UnicornioenelCaféLibertad25añosdespués”enunaespléndidaantologíaquehadadoalaluzlaeditorialCarenayqueestá teniendo una repercusión inusitada en España, y ya se está distribuyendo desde hace unas semanas en México y otros lugares de Hispanoamérica. Pedro Rodríguez Pacheco, que ha preferido no estar como poeta para ejercer de antólogohaceunacrónicaesencialdelo quefueysiguesiendoelmovimientoregeneracionista,críticoytestimonialque seconocióysedistinguióconelnombre de la Diferencia. Esta antología –que la componenpoetascomoManuelJurado López, Pedro J. de la Peña, Ricardo Bellveser, Concha García, A. Rodríguez Jiménez y Fernando de Villena- sirve para visualizar a algunos de los poetas que se comprometieron con aquella declaración de principios –independencia, libertad, personalidad y autonomía- y que fue unantesyundespuésenlahistoriadelapoesíaespañola.
Las voces en esta antología, dan idea de la calidad de la poesía española contemporánea