The Game, el aprendizaje de un juego que se vive todos los días
Hacia 2006, Alessandro Baricco publicó el libro Next, que aborda la globalización y el mundo que viene; una serie de reflexiones de asuntos que no dejaban de ser inciertos en aquel momento, sobre todo, al hablar acerca de la circulación de las ideas.
Un par de años más tarde apareció Los bárbaros. Ensayos sobre la mutación, donde el autor italiano analiza la presencia de Google en la vida de todos los días, a partir de la idea de que se trata de un avance tecnológico “girar nuestros principios 180 grados”.
Una mirada crítica que no se ha detenido con el paso de los años, por el contrario, se ha agudizado, pero no con un espíritu pesimista: por el contrario, Baricco se propone acercarse a esos temas con los ojos de un navegante en busca de nuevos territorios; entiende los procesos y, al mismo tiempo, traza una cartografía de aplicaciones que forman parte del día a día.
Ello se encuentra en el libro The Game, publicado por Anagrama, un recorrido por la manera en que las computadoras personales, los teléfonos inteligentes y muchos otros dispositivos digitales se han convertido ya no digamos en herramientas indispensables, sino en instrumentos para vivir; incluso, desde la perspectiva del escritor italiano, han transformado parte de la realidad y nuestra relación con ella.
“The Game admite casi en exclusiva a jugadores singulares, está pensado para ellos, desarrolla las capacidades del jugador singular, les da puntos. Incluso Trump y
el papa envían tuits… Así, Game se ha convertido en la grandiosa incubadora de un individualismo de masas que nunca habíamos conocido, que no sabemos cómo tratar y nos pilla esencialmente sin preparación”, escribe Baricco.
The Game es un libro crítico, pero valdría más el término analítico. Más que seguir la discusión entre lo analógico y lo digital, la apuesta es por recordar que ya estamos inmersos en una atmósfera en la que debemos aprender a sobrevivir: conocer las reglas del juego para no perdernos en él, porque a final de cuentas se trata de asumir la responsabilidad de lo que hacemos con todas esas herramientas tecnológicas que dominan lo que hacemos a diario.