Lady Piñata, pero pirata
Cuando vi el video de Lady Piñata pensé que se trataba, dado su desgobierno, furia y nulo sentido de la morigeración, que era una americanista celebrando el regreso con poca gloria y lustre de Paco Meme Ochoa al cursimente llamado Nido de Coapa (ya ven que están celebrando como si hubieran contratado a Jean Lucca Pagliuca o Emmanuel Neuer, Allison o al Pájarito Cortez) de una de esas entusiastas de la
onda medieval extraviada en el siglo XXI que tundieron en lasredesaunconocidoministrodelaTremendaCorteconel hashtag #FueraZaldívar por haber votado a favor de una ley que permite la interrupción legal del embarazo en cualquier parte del país a cualquier mujer que haya sido violada.
Sí bien es cierto que el impartidor de justicia tiene más sombras que luces en su carrera, no puede ser que ahora me lo quieran malbaratar las huestes del ultraconservadurismo pando a las que les falta un grado para salir a la calle con cucurucho y sábana blanca.
Pero no, todo indica que Lady Piñata solo representa a esa categoría nada novedosa de individuos que por falta de ácido fólico o una educación sentimental basada en el reguetón simplemente quieren resolverlo todo a chingadazos. Claro que la histeria en la que hoy vivimos lleva a alguna gente con limitada capacidad para la sinapsis a pensar que estas criaturas violentas llegaron con la cuarta transfomeichon, cuando en realidad siempre han estado entre nosotros.
Bueno, hasta tuvimos un gran ex presichente de la talla minion como Jelipillo Calderón, que todos los días tenía su metamorfosis en energúmeno hiperviolento.
Más o menos como se ponen los que hoy abominan y se sacan los ojos por la continuidad de la Fórmula 1 en CdMx (que será financiado por el empresariado, hasta que cortamos una flor de su jardín), y que hace unos meses lloraban amargamenteporqueibaadesaparecer elGranPremio.Nomanchen,dénlesalgo, aunque sea un rato con Lady Piñata.
Como sea, todos nos hemos topado con una Lady Piñata en cualquiera de sus encarnaciones granaderiles. Digo, la única vez que le agradecí el apoyo a unos perjudiciales ochenteros fue cuando me salvaron de unos lords piñata que me querían abaratar gacho en la Glorieta del Metro Insurgentes.
A ver si a Chayito Robles no se injerta en lady ahora que le negaron la suspensión definitiva contra las órdenes de aprensión.
A ver si a Chayito Robles no se injerta en lady ahora que le negaron la suspensión definitiva