94 años de UdeG
La universidad se enfrenta a la hipertecnologización
A 94 años de su fundación, la Universidad de Guadalajara afronta retos importantes en materia de investigación y generación del conocimientodecaraaunmundohipertecnologizado,porloque,luego de dos momentos históricos clave, llególahoradeuntercero,enelque se realice un proceso de reflexión y autocrítica interna.
A través de un comunicado, la CasadeEstudiodestacóquesehan vividodosmomentoshistóricos:la refundación de 1925 y la creación de la Red Universitaria de 1994. Por lo que en esta ocasión se abre la puerta a un tercer proceso de reflexión interna.
En el texto, el especialista en Educación Superior de la UdeG, Adrián Acosta Silva, dijo que la institución tiene un legado de formación de profesionistas y buenos ciudadanos que son líderes en los sectorespúblicoyprivado,además de internacionalizarse y consolidarse con indicadores de calidad
El 12 de octubre de 1925 renació la moderna UdeG como una institución sostenida en los principios de pluralidad, equidad y acceso libre a la educación para todos.
El también investigador del Centro de Estudios Estratégicos para el Desarrollo (CEED) y del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA), de la UdeG, dijo que el primer gran momento histórico de la era moderna fue la refundación de 1925, con el rectorado de Enrique Díaz de León, en el cual la UdeG logró sobrevivir a un periodo convulso y consiguió un crecimiento que la posicionó en el contexto nacional.
A finales de la década de los 80, voces al interior de la Universidad pedíanunamodernizaciónconeficiencia y calidad. Vino así el segundogranmomentohistóricodurante el rectorado del licenciado Raúl Padilla López (1989-1995), cuando se creó la Red Universitaria con la Nueva Ley Orgánica promulgada en 1994, que descentralizó a la Universidad de Guadalajara y llevó centros universitarios a las distintas regiones de Jalisco.
“Hoy tenemos una Universidad distinta a la de 1925, distinta a la que existía en los años 80. Es necesarioirrevisandoaspectosquehan sido positivos, y otros que merecerían una atención más puntual parapensarenunanuevageneración dereformasquefortalezcanlapresencia local, nacional e internacionaldelaUniversidaddeGuadalajara, subrayó.
Sobre si es momento de una tercera transformación, el especialista dijo: “Yo sería más precavido. Debemos entrar a una etapa más reflexiva, que nos permitiera hacer un balance muy puntual de lo que hemos hecho bien, que son muchas cosas y de cara a la construcción de una agenda que coloque los temas fundamentales que ya no pueden ser abordados por la manera en que está funcionado la Universidad, y que requieren un nuevo repertorio de respuestas institucionales a estos nuevos problemasquehanvenidosurgiendo”, respondió.
“Hay una agenda que tiene que ver con temas como la internacionalización de la educación superior –agregó–, la gobernanza institucional, la diversificación y heterogeneidad del estudiantado, el papeldelosinvestigadoresyprofesores como núcleo académico básicodelaUdeG,lagestióndelosrecursos,elfinanciamientopúblicoy autogenerado. Son temas de agenda que perfilarían, en su caso, un proyecto institucional que podría dar una respuesta adecuada para los desafíos del siglo XXI”.
Acosta Silva se refirió al problemadelfinanciamientoalasuniversidades en el contexto del reciente parodeinstitucionesdeeducación superior por los recortes federales. Reflexionó que este tema ha sido permanente, pues la Universidad de Guadalajara, históricamente, no ha recibido el presupuesto suficiente que requiere para sus actividades.
“Lo novedoso es que se agudiza de forma extraordinaria en un entorno de incertidumbre presupuestal para todas las universidades públicas del país. Es un tema que, por ser permanente, exige solucionesdelargoplazoyconmayor estabilidad institucional. Implica dilemas importantes. Por un lado, seguir dependiendo del subsidio público estatal o federal, o buscar nuevas alternativas de atraer financiamiento que disminuya la enorme dependencia de recursos públicos. El tema está ahí, es permanente, no coyuntural, y los universitarios necesitamos repensar de qué manera podemos avanzar para disminuir la incertidumbre financiera que año con año le pega a la UdeG”, acotó.