Tigres dominó, pero no liquidó
Liguilla. Pese a que las felinas generaron muchas opciones de gol durante el partido de ida de la Final de la Liga Mx Femenil, Monterrey logró salir con el empate gracias a una jugada a balón parado
que se han disputado en la historia de la Liga femenil, el partido de ida fue dominado por Tigres en casi los 90 minutos de juego, pero no logró concretar todas las opciones que generó. Es más, apenas a los cinco minutos las felinas ya tenían el marcador a su favor gracias al gol de Belén Cruz, quien aprovechó un rechace luego de una gran jugada individual de Lizbeth Ovalle.
Después del tanto Tigres se fue encima, con un dominio abrumador, generando al menos dos opciones claras de gol. La primera llegó al minuto 25 cuando en una jugada a balón parado, la portera rayada apenas pudo sacar la pelota de la línea de gol y en el rechace el balón se estrelló hasta en dos ocasiones en el poste.
Instantes después Ovalle sacó un tiro de media distancia que pasó apenas a un lado de la portería del Monterrey; luego, de nuevo la delantera felina se plantó con peligrosidad en el área, pero la zaga alcanzó a rechazar. Fue hasta los últimos instantes del primer tiempo que Monterrey tuvo su primer arribo, pero nada que inquietara a la portera Ofelia Solís que contuvo bien un disparo de media distancia.
La reacción de las Rayadas
Pero así como fueron superadas ampliamente en el primer tiempo, las rayadas salieron con otra actitud para el complemento y lograron nivelar las acciones y también lo reflejaron en el marcador en los primeros 10 minutos de haberse reanudado el partido.
Al minuto 54 vino un tiro de esquina a favor del Monterrey, el centro llegó hasta el corazón del área donde Annia Mejía se levantó con total libertad, ante la poca resistencia de la defensa felina; la zaguera rayada conectó un testarazo que se incrustó en las redes de la portera Ofelia Solís.
Monterrey ya había logrado lo más complicado que era sacudirse la presión del local y el emparejar el marcador; sin embargo, poco a poco Tigres volvió a asumir el control del juego y a generar opciones claras para volver a tomar la ventaja.
Por ejemplo, al minuto 66, en un desdoble rápido, vino un centro que le quedó un poco arriba a Katty Martínez, quien cerraba sin marca alguna; dos minutos después Ovalle tuvo un mano a mano con la portera Solís, en el que salió avante la guardameta.
Tigres dominaba el partido y parecía cuestión de tiempo para que sacara ventaja; sin embargo, el tiempo se le acabó y se conformó con el empate, dejando todo para la vuelta.