Médicos al matadero III
Cubrebocas piratas o “clones”, de marca “patito” que rápido se abren como picos de pato (¿o de ganso?) o cubrebocas que hasta el fabricante especifica que es para uso civil y no médico y aún así se los reparten en los hospitales públicos.
Batas delgadas que se rompen fácilmente, que no ofrecen protección completa ni efectiva y que tampoco aguantan el reuso. ¿Darles overoles (tyvek) de calidad, difícil. De goggles o calzado plástico ni se diga, no se dan al personal médico y auxiliares que están atendiendo a los pacientes con covid-19en hospitales públicos.
Lo anterior es un resumen de las posibles causas que algunos profesionales de la medicina y enfermería han compartido con quien esto escribe sobre por qué los trabajadores de la salud están contagiándose más en México de SARS-Cov2 que en otros países.
Los testimonios coinciden en Cancún, San Luis Potosí, Ciudad de México, Zitácuaro, Veracruz, Guadalajara o Mexicali: primero, no hay suficientes Equipos de Protección Personal (EPP) y segundo, lo que dan no es de la calidad o de la protección mínima necesaria… y no se atreven a exigirlo por temor a ser despedidos.
Pagar de su bolsillo un EPP básico contra el SARS-Cov2 (overol, bata, guantes, careta y cubrebocas adecuados) puede representar un gasto semanal de 3 mil 950 pesos según un cálculo de la doctora en Salud Pública y especialista en epidemiología Cynthya Galaz.
Si se contrasta este monto con los salarios de médicos generales del sector salud que perciben de 5 a 10 mil pesos quincenales, sería invertir todos sus ingresos y más o casi todo en equipo de protección que no les dan en su centro de trabajo. Para un enfermero o enfermera es peor la situación pues sus sueldos oscilan de 4 a 6 mil pesos a la quincena.
Claro que este presupuesto para EPP puede ser elevado también para el sector público, pero pensemos: ¿Qué ocurre cuando los inspectores del IMSS o la Secretaría del Trabajo, por ejemplo, detectan que una factoría no dota de equipo de seguridad a sus soldadores? ¿Entonces por qué no se procede igualcontralasinstitucionesdesaludque no están protegiendo a sus empleados?
Recientemente el gobierno federal colocó bonos por 6 mil millones de dólares. Dinero hay ¿pero, voluntad?
Los testimonios coinciden en Cancún, San Luis Potosí...