Población sorda sufre de rezago educativo y social
Formación. Alrededor del 40 por ciento son analfabetas, pues dejan la escuela a temprana edad
En Jalisco, existe una comunidad de aproximadamente 75 mil personas sordas, de las cuales el 40 por ciento son analfabetas, de acuerdo con el registro del Instituto Nacional de Estadística y Geografía; como resultado viven discriminación y rezago educativo, cultural, social y lingüístico.
María Guadalupe Martínez Díaz de Sandy, intérprete de señas en el Ayuntamiento de Guadalajara, explica que muchos sordos salen de la escuela entre los 10 y 14 años de edad, “como los discriminan no tiene acceso a la educación básica, entonces muchos son sordos relegados, si vas y visitas a un sordo puede ser que lo encuentren en un cuarto, o el otro extremo, son muy estudiados que tienen licenciatura”.
Sus padres son sordos, por lo que la primera lengua que aprendió fue de señas, después español, esto la llevó a experimentar las dificultades que tiene este sector de la población. “Era un poco complicado que las maestras entendieran que era mi primera lengua incluso ante la sociedad era un poco complicado. Soy hija de padres sordos por eso nosotros siempre decimos que es nuestra lengua materna”, señaló.
A pesar que a nivel mundial la lengua de señas es reconocida como un idioma más, los retos para los intérpretes son los modismos que existe en cada país: “Al momento en que tú convives con otras personas sordas que no son tu familia te das cuenta que hay regionalismos en el municipios de Jalisco hay una manera de enseñar y que ellos te empiezan a decir, no es igual”.
Otro de los factores que reflejan la discriminación es la falta de acceso a interpretaciones en materia de ideología, espiritualidad o filosofía, cimientos que construyen la vida de cada ser humano. Eliseo López, intérprete del DIF de San Pedro Tlaquepaque, dijo que “dentro de la comunidad sorda, muchas veces hay una falta de conciencia acerca de las muchas religiones que hay o creencias. Yo pienso que es un área delicada para todos los sordos porque no es tan fácil para ellos escuchar las múltiples religiones o tipos de creencias y se van por el lado que les ofrecen un intérprete o servicio en el que puedan entenderlo”.
Las personas sordas suelen ser solitarias y tener una red de amistad muy pequeña, a pesar de que se conocen entre todos. El problema son las barreras construidas por la propia sociedad que los vuelve invisibles. “El problema somos nosotros, como las personas en sillas de ruedas. El problema no es la silla, son las banquetas, los baches. Hasta yo me he caído en las alcantarillas públicas abiertas tener poca accesibilidad”, dijo Eliseo.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) emitió hace dos años la recomendación 49/2018 por la violación del derecho a la legalidad, a la igualdad y no discriminación, al trato digno, al desarrollo y a la educación inclusiva, bilingüe-bicultural para niñas, niños, adolescentes y jóvenes sordo, la cual no ha sido subsanada en su totalidad.