Pekín limita crédito para calmar auge inmobiliario
Economía. El banco central solicita un mayor control de hipotecas ante dudas sobre la estabilidad financiera; las ventas de casas nuevas subieron 133% en enero y febrero
El banco central de China le pidió a las instituciones financieras que controlen la oferta de crédito, ya que el aumento del endeudamiento que sostuvo la recuperación del coronavirus del país, alimentada con deuda, renovó las preocupacionessobrelasburbujasdeactivos y la estabilidad financiera.
El crecimiento de nuevos préstamos alcanzó 16 por ciento en los primeros dos meses del año. El Banco Popular de China respondió en febrero al dar instrucciones a los bancos nacionales y extranjeros que operan en el país de mantener los nuevos préstamos en el primer trimestre del año aproximadamente al mismo nivel que el del año pasado, si no es que más bajo, de acuerdo con personas con conocimiento de la situación.
Esta medida puede traducirse en una considerable caída en los préstamos bancarios, la mayor fuente de financiamiento para la segunda economía más grande del mundo. Además subraya un cambio en el enfoque de las polí“El ticas, ya que Pekín cambió el escrutinio regulatorio para controlar los riesgos de crédito en lugar de impulsar el crecimiento económico, que ya regresó a los niveles previos a la pandemia.
Las medidas de endurecimiento, encabezadas por cuotas más estrictas sobre préstamos inmobiliarios, hasta ahora han logrado frenar el crecimiento del crédito. Los préstamos al consumidor de mediano y largo plazo, que están compuestos principalmente por préstamos hipotecarios, subieron 72 por ciento, para alcanzar un récordde1.4billonesdeyuanesenlos primeros dos meses de este año.
La rápida recuperación de China brindó un apoyo vital a lo largo de la pandemia para la economía global y las empresas multinacionales, al ofrecer una sólida fuente de demanda para los bienes de consumo y las materias primas.
El producto interno bruto de China se expandió 6.5 por ciento en el último trimestre del año pasado, lo que convirtió al país en una de las pocas naciones que registró un crecimiento económico positivo para todo el año. Pekín ya estableció un objetivo de crecimiento dealmenos6porcientopara2021.
Con la economía en pleno auge, los responsables de la formulación de políticas centraron su atención en el riesgo de un sobrecalentamiento y lanzaron una ofensiva general contra el exceso depréstamosyelriesgofinanciero.
“Los temores sobre una recesión alimentada por la pandemia desaparecieron”, dijo Larry Hu, economistajefeparaChinadeMacquarie Group en Hong Kong.
El auge de los préstamos a principios de 2021 se produjo después de una fuerte recuperación en las transacciones e inversiones inmobiliarias chinas, ya que el estímulo de la pandemia de Pekín elevó el mercado local de vivienda.
Las ventas de casas nuevas en China se dispararon 133 por ciento en enero y febrero de este año, mientras que la inversión inmobiliaria subió 38 por ciento. Esta demanda dio un impulso hasta de 14 por ciento a los préstamos de bienesraíces,unmáximodesieteaños durante el mismo periodo.
sector inmobiliario es la industria más segura para trabajar, ya que muy pocas garantías son mejores que un departamento físico”, dijo un banquero con sede en Shanghái.
Pero a medida que despegaron los precios de las viviendas en los centros costeros de China, Pekín promulgó una serie de medidas diseñadas para poner bajo control el auge de la vivienda, encabezadas por una ofensiva contra el uso indebido de préstamos empresariales en las compras de bienes raíces.
En diciembre de 2020, el Banco Popular de China también endureció su límite sobre los préstamos transfronterizos, lo que restringió la capacidad de los bancos para expandirseenChina,inclusocuando Pekín se comprometió a seguir liberalizando los controles de capital y permitir a los extranjeros participar en su mercado financiero.
Las restricciones tenían el objetivo de desacelerar el alza del yuan, que subió cerca de 7 por ciento en su paridad con el dólar estadunidense en 2020, pero el alza de la moneda amenazó con socavar las crecientes exportaciones de China, que subieron más de 18 por ciento en diciembre, para llevar el superávit comercial a un récord mensual en la demanda impulsada por la pandemia.
Otro banquero dijo que las últimas restricciones a los préstamos presionaron a muchos bancos pequeños, incluidos los extranjeros, para reducir “radicalmente” los nuevos préstamos que habían superado el umbral regulatorio.
“Es difícil mantener los préstamosinmobiliariosenunapequeña proporción de la cartera de créditos cuando otras industrias tienen más riesgos”, añadió.