A votar con morado
doraraquel.nunez@gmail.com
Esta ola feminista ha puesto sobre la mesa temas que por años dejamos guardados en un cajón, ahora que hemos decidido sacarlos y ser parte del cambio para erradicar los comportamientos que nos hanviolentado,debemosconsiderarque quienes elijamos para representarnos sean capaces de reconocer la importanciadeestemovimientoyformenpartede esta transformación social.
Sin embargo, las campañas han puesto en evidencia la misoginia y machismo queprevaleceentrelospartidospolíticos y sus candidatos. Desde el apoyo del PresidenteaFélixSalgadoMacedonio,quien aspiraba a gobernar Guerrero con al menosseisdenunciasdeabusosexual;hasta SamuelGarcía,quevaporlagubernatura deNuevoLeónysedirigióasuesposacomo si fuera de su propiedad.
Ni siquiera las cámaras han intimidado a David Monreal, candidato de Morena en Zacatecas, que ya en dos ocasiones ha sido señalado, primero por una declaración ofensiva y después por tocar inapropiadamente a una mujer en un acto proselitista.
Hasta el partido más conservador se ha valido de la sexualización de las aspirantes para ganarse al electorado. Tal es el caso de Lupita Gómez, del PAN, que va por la diputación del Distrito 14 en Jalisco.“Hazloconmigo(elcambio),noconla Morena”, se lee en la propaganda, también calificada como “racista”.
Lasmujeressomospocomásdelamitad de la población, y necesitamos estar representadas. No podemos permitir que en puestos de poder haya personas que minimizan la violencia de género y tengan manifestaciones misóginas.
La fuerza que ha tomado el morado en los últimos años se ha reflejado también en la legislación, al aprobarse la Ley Olimpiaen29estadosdelpaís,LeyIngrid e incluso la interrupción legal del embarazo en Oaxaca en septiembre de 2019. Para seguirescalandopeldaños, el próximo proceso electoral es de suma importancia. Tenemos que elegir con cuidado a quienes hablarán por nosotros en los espaciosdelatomadedecisiones.Nohay vuelta atrás, hay que seguir subiendo.
Punto y aparte
Las Paritaristas, mujeres en la política y organizaciones que buscan garantizar la paridad y ser una red de apoyo, son muestra de que la política no es ni será igual.
Las campañas han puesto en evidencia la misoginia en la política