Poliedro visual
El Museo Universitario del Chopo presenta Líneas y piedras de Pablo López Luz (Ciudad de México, 1979), un artista que conmueve y nos obliga a mirar. Y lo que re–miramos es parte de un alrededor que damos por sentado sin percatarnos del legado visual de la arquitectura de las culturas antiguas, que se ha permeado hasta nuestros días. Las 135 fotografías expuestas resaltan las estrategias ocultas de esas identidades precolombinas que silenciosamente siguen ocupando el espacio público en sutiles actos de resistencia que claman, más que sus derechos a permanecer, por una manera particular de pararse en el mundo.
López Luz se enfoca en la representación de la pirámide actual; así nos revela lugares, estructuras, fondos y juegos insólitos donde esta figura geométrica aparece y desaparece —en distintos poblados de México, Perú y Bolivia— como un fantasma que prefiere ocultarse en el palimpsesto urbano y repentinamente —y pese a los afanes por globalizar el paisaje arquitectónico del mundo— emerge en paredes, banquetas… para recordarnos que hubo —y hay— otras formas de ver. Nos meten a un universo paralelo donde el hilo narrativo es la presencia indígena poderosa en el hoy globalizado.
Otro de los atractivos de esta muestra es la edición. Alexis Fabry, curador y editor, estructura un ensayo visual complejo, redondo, potente, sin opacar al autor. Aquí lo que importa es la mirada del artista (como dijera un comercial de los noventa) y no la necedad del curador en explicar una teoría o su visión personal. El editor/ curador se camaleoniza con el artista y hace que sus imágenes digan aún más de lo que ya dicen; asimismo, la museografía energetiza la propuesta. Resulta atinado que la exposición se recorra mientras se sube por rampas, creando un juego en el cual el espectador va subiendo por una pirámide mientras observa otras destellar en las imágenes.
Esta exhibición reúne parte de un proyecto iniciado en 2011 y, aunque todavía está en proceso, en 2013 tuvo una primera salida en el libro Pyramid (Editorial RM). Transitamos por el trabajo de López Luz conviviendo con lo verdadero y lo falso, con alusiones directas a las culturas prehispánicas, así como con representaciones más simbólicas y en ocasiones abstractas, y pastiches captados por un fotógrafo que está mirando cuando, a su vez, del otro lado de la cámara observa, en su memoria, las líneas y piedras de los paisajes de Gunther Gerszo, abriéndonos una ventana a un mundo en el que los tiempos se abrazan.