Lola Beltrán, recordada en el Teatro Alvarado
Cientos de laguneros recuerdan a la sinaloense, quien es de las máximas exponentes de la música vernácula
Con un teatro completamente abarrotado, un emotivo mariachi y su hija como invitada de honor, cientos de laguneros recordaron a la famosa cantante sinaloense, Lola Beltrán, quien es una de las máximas exponentes de la música regional mexicana.
Cabe destacar que este tributo se realiza desde hace 21 años gracias a Pablo Lira y a sus amigos, quienes han recordado a esta gran cantante durante 26 homenajes.
Lola Beltrán, también conocida como Lola “La Grande” dejó este mundo terrenal en el año de 1996, a la edad de 64 años y aunque han pasado 21 años desde su partida, para los laguneros, la reina de la canción ranchera sigue presente en cada uno de los homenajes que se le han realizado año tras año en el Teatro Alberto M. Alvarado, y esta vez no fue la excepción.
Aunque el evento que se realizó ayer comenzaba a las 20:00 horas, decenas de personas, en su mayoría de la tercera edad, se dieron cita a las afueras de teatro desde las 18: 00 horas para hacer f ila y tener uno de los mejores lugares para deleitarse del popurrí que se preparó para todos ellos y para la misma Lola.
El homenaje comenzó con la música a cargo del mariachi “Grupo Impulsor de la Música Representativa de México” y bajo la voz de Karime Salas entonando “Cuando el destino” lo cual trajo consigo el coro y los aplausos de los ahí presentes, quienes continuaron con los cantos cuando César Gabriel Franco cantó “Dos arbolitos” y “El herradero”.
Lo más esperado del homenaje llegó casi al final de la noche, cuando María Elena Leal Beltrán, hija de Lola, apareció en
“La gente mayor está ávida de escuchar rancheras; no todo es banda o grupero”
el escenario cantando algunas de las canciones más icónicas de su madre, cesando su voz bajo un mar de aplausos y gritos provenientes del público.
“Tristes recuerdos”, “Volver
Cucurrucucú Paloma, Huapango Torero y Paloma Negra, letras que no deja de cantar
volver”, “Vámonos”, “Se me olvidó otra vez”, “El sinaloense” y “Cielo rojo”, fueron los éxitos que María Elena entonó para recordar a su madre, viendo la gran pintura de la reina de la canción ranchera, Lola Beltrán, que se colocó en alto al fondo del escenario.