Poco llueve

No cabe duda que en la región lagunera poco llueve y cuando cae el agua del cielo, lo hace con granizo. Las lluvias se dicen traen muchos beneficios, ayudan a que los campos vuelvan a tener vegetación, empiecen a florecer y además ayuda en algo a mitigar el calor. Pero no a todos les cae bien el agua de lluvia acompañada de granizo, ya que la misma afecta cultivos como el algodón, sorgo forrajero y maíz, sin olvidar el daño que le hace a las plantas de melón.

Los agricultores le apuestan todo su dinero a unas tierras que poco a poco se van secando, invierten sus ahorros, piden prestado y año con año ahí están sembrando. Ahora durante los dos días que llovió, las afectaciones no se hicieron esperar, por lo que gente del campo de Madero, Matamoros, Lerdo, Gómez Palacio y Tlahualilo, tuvieron pérdidas económicas considerables, luego de que quedaran siniestradas más de mil 500 hectáreas de cultivos.

Esto es apenas el principio, los meloneros de San Pedro y Matamoros, saben que el granizo pica la fruta y se las echa a perder, además que los compradores así no la quieren. Es cuando los que lograron salvarse de estas lluvias con granizo, pueden librar la temporada ante el incremento de los precios, ya que a menor producción, el kilo del melón sube considerablemente.

Pero estas lluvias no solamente ayudan, también pueden ser perjudiciales, ya que manchan la fibra del algodón, afectando con ello la producción y los costos. Estas lluvias esporádicas, ocasionan que empiecen a llegar las plagas a los cultivos, que los insectos hagan de las suyas en la planta del algodón o bien, que la plaga del “picudo” empiece a afectar los sembradíos de maíz, de sorgo forrajero, lo mismo que el gusano cogollero, los cuales si no son atacados a tiempo, pueden ocasionar mucho daño a los sembradíos.

Cada año se presentan diferentes afectaciones en los cultivos en la región lagunera, los agricultores o campesinos, sufren y algunos con el paso del tiempo han preferido rentar sus tierras, ya que el dinero para labrarlas se les acabó, las pérdidas que tuvieron el año pasado, los dejaron en la calle. No cabe duda que los que tienen dinero, son quienes con tecnología las pueden aprovechar.