LA SOLICITUD PUEDE SER CALIFICADA DE OBSTRUCCIÓN A LA JUSTICIA Trump pidió a Comey “olvidarse” de Flynn
El ex director del FBI declara hoy ante el Comité de Inteligencia del Senado
l ex director del FBI James Comey afirmó que el presidente Donald Trump le pidió que dejara en paz al general Michael Flynn, investigado por sus contactos con Rusia, según el testimonio que presentará hoy ante el Comité de Inteligencia del Senado y que fue divulgado ayer por la Cámara alta. “Necesito lealtad. Espero lealtad”, le dijo Trump a Comey, según el documento, con tintes cinematográficos.
En el demoledor texto de siete páginas, Comey, despedido en mayo mientras investigaba sobre la presunta injerencia rusa en la elección presidencial, afirma que en una conversación en la Casa Blanca, Trump le pidió que se olvidara de Flynn, quien había renunciado como asesor de Seguridad Nacional del mandatario. “Él me dijo: ‘Espero que usted pueda ver un camino para dejar esto, dejar tranquilo a Flynn. Es un buen tipo. Tengo la esperanza que pueda olvidarse de esto’”, relató Comey, quien conducía una investigación sobre los lazos entre Rusia y el comité de campaña de Trump en los comicios de 2016, y uno de los investigados era Flynn.
El pedido de Trump a Comey puede ser visto como un intento de obstrucción de la justicia, un delito previsto en la legislación de Estados Unidos y con efectos imprevisibles para la presidencia en un momento crítico para Trump.
No obstante, Marc Kasowitz, el abogado privado del presidente , dijo que éste se siente “totalmente reivindicado” por el testimonio de Comey. Trump está “complacido” de que el ex director del FBI “haya finalmente confirmado públicamente sus informes privados de que el presidente no era investigado en ninguna pesquisa relacionada con Rusia”, dijo Kasowitz.
En su testimonio escrito, Comey afirma que al salir de su primer encuentro con Trump redactó un memorando interno para discutir la situación con sus subordinados más próximos. La conducción del Buró Federal de Investigaciones (FBI), agregó, “estuvo de acuerdo conmigo en que era importante no infectar el equipo de investigación con el pedido del presidente, que yo no tenía intención de acatar”.
Mientras, Trump anunció en su cuenta de Twitter que nombrará a Christopher A. Wray, “un hombre de impecables credenciales”, como nuevo director del FBI en reemplazo de Comey.
La expectativa en Washington ante la comparecencia de Comey es tan grande que diversos bares abrirán más temprano ante la transmisión de la sesión en directo por televisión.
Los senadores interrogaron ayer en audiencia pública a Dan Coats, director Nacional de Inteligencia; Michael Rogers, director de la Agencia Nacional de Seguridad; Andrew McCabe, director interino del FBI y a Rod Rosenstein, Fiscal General adjunto.
Coats y Rogers negaron enfáticamente durante la audienciahaber sufrido presiones de cualquier orden para ejercer sus funciones, pero también rechazaron ofrecer detalles de sus conversaciones con Trump, lo que causó la ira de los senadores, como Marco Rubio.
Un sondeo de la Universidad de Quinnipiac reveló ayer que solo 34 por ciento de los estadunidenses apoya la gestión de Trump al frente del gobierno de EU, el menor porcentaje en los casi cinco meses de la actual administración del mandatario republicano.