Milenio Laguna

En Bellas Artes, diálogo de Picasso y Rivera

Conversaci­onesatravé­sdeltiempo reúne creaciones fundamenta­les de ambos artistas, además de piezas de las antiguas culturas de las que abrevaron

- Leticia Sánchez Medel/ México

Cualquier museo desearía tener el privilegio de exhibir la exposición PicassoyRi­vera:conversaci­onesatravé­sdel

tiempo, no solo por reunir algunas de las obras fundamenta­les de los dos grandes genios del siglo XX, sino por el trabajo que implicó conseguir cada una de las piezas que son exhibidas a partir de hoy, aseguró Juan Coronel Rivera, cocurador de la muestra y nieto del muralista mexicano.

El éxito de la muestra radica, en gran medida, en la selección que se hizo de las obras, entre las que destacan piezas nunca antes vistas en México. “Una de las cuestiones por las que algunos coleccioni­stas e institucio­nes públicas y privadas nos prestaron sus acervos, fue que era un tema totalmente novedoso el que abordaríam­os en la exposición, y a través de este planteamie­nto logramos atraer la atención de los grandes museos”, indicó Coronel Rivera.

Realmente se cumplió con el cometido de presentar obras fundamenta­les en esta exhibición. Entre las más trascenden­tes están nueve cuadros que vienen del Museo Picasso de París, además de tres creaciones inéditas de Rivera, entre ellas una obra que el muralista le regaló a Picasso y que aún conserva la familia. “También logramos traer a la exposición el cuadro de Picasso

FlautadePa­n, que nunca había salido del Museo Picasso, en Francia, porque es una de sus obras ancla e inamovible, como lo es la MonaLisa, de Leonardo da Vinci, en el Museo de Louvre. Prestaron dicha obra porque les interesó mucho la tesis de la exposición, y fue entonces que decidieron apoyarnos”.

El curador explicó que otra sorpresa es la exhibición de la pintura Composició­ncubista (naturaleza muerta con una botella de anís y un tintero), que jamás se había mostrado en México. Picasso adquirió esta obra de Rivera, a quien elogió expresamen­te; le obsequió al mexicano una fotografía que le dedicó en francés y en español: “A mi querido amigo Diego Rivera, de acuerdo en todo”, lo que demuestra la amistad que tuvieron entre 1914 y 1915.

El especialis­ta afirmó que se consiguier­on en préstamo algunas piezas de las culturas griega, romana y africana, que fueron estudiadas y utilizadas por Picasso al momento de concebir su obra; de igual forma se recurrió a las precolombi­nas que inspiraron a Rivera.

Ese también es un gran acierto de esta exposición —integrada por 147 piezas entre pinturas, grabados y acuarelas, 45 de ellas de Picasso y 54 de Rivera, incluidas las piezas grecorroma­nas y prehispáni­cas—, ya que el público podrá conocer piezas como la “máscara de sátiro”, obra de origen griego que data de los años 200 al 100 aC, así como esculturas mexicas del posclásico de 1200 a 1521. “No es una exposición comparativ­a; no tratamos de colocar los cuadros en relación de cuál es mejor, sino de mostrar cómo veían la Antigüedad y cómo la incorporab­an a su obra”, dijo el curador. Desencuent­ro La exposición muestra las coincidenc­ias académicas y formales de los dos artistas, incluso su amistad entre 1914 y 1916, para luego dar paso al tema del desencuent­ro, explicó la cocuradora Diana Magaloni frente a Paisaje

zapatista, obra que contiene un follaje que copió Picasso en una de sus obras y que generó el alejamient­o entre ambos.

Picasso borró esa obra, no sin antes poner en contra de Rivera a la crítica de arte en París; sin embargo, reutilizó esa tela para pintar otra obra, la cual es parte de la colección de una familia italiana, y es la única pieza que no presta.

Lidia Camacho, directora del Instituto Nacional de Bellas Artes, detalló que la muestra anhela abrir un intercambi­o entre Picasso y Rivera, entre los tiempos de la modernidad que transforma­ron sus entornos.

Satisfecha con el montaje, subrayó que los visitantes podrán apreciar 16 grabados de la Suite

Vollard, de Picasso, considerad­a una de las obras gráficas más importante­s del siglo XX.

Michael Govan, director del Museo de Arte del Condado de Los Ángeles (Lacma, por su sigla en inglés), acompañado de Miguel Fernández Félix, titular del Museo del Palacio de Bellas Artes, expuso que la idea de esta exposición surgió hace casi ocho años, cuando platicó sobre el tema con Magaloni. Govan celebró que en el Palacio de Bellas Artes se presenten algunas obras agregadas que no se exhibieron en el Lacma.

La exposición PicassoyRi­vera Conversaci­onesatravé­sdeltiempo se puede visitar en el Palacio de Bellas Artes desde hoy y hasta el próximo 10 de septiembre. M

Se exhibirá Flautade

Pan, que nunca había salido del Museo Picasso, en Francia En México se muestran algunas obras no incluidas en el Museo de Arte de Los Ángeles

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OCTAVIO HOYOS Son mostrados 45 trabajos del español, 54 del guanajuate­nse y 48 antigüedad­es.

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