Eterno candidato
Las elecciones del Estado de México y Coahuila ya son un referente obligado para visualizar lo que sucederá el año próximo cuando el país vivirá los comicios más complejos de su historia: Habrá elecciones presidenciales, de senadores y de diputados federales, así como elecciones concurrentes en 30 estados entre las que destacan las de 9 gobernadores.
Si se confirman los resultados del 4 de junio el PRI quedaría con 14 gubernaturas, el PAN con 11, el PRD con 5, el Verde con uno y un Independiente con Nuevo León. Así el partido en el poder descendería a su nivel más bajo desde que comenzó a perder gubernaturas en los 90 y el PAN encabezaría 11 entidades federativas con el mayor número de gubernaturas en su poder. En este sexenio el PAN creció en los comicios del 2016 pero en los de este año Morena lo desplazó y superó al PRI sin aliados en la votación del EdoMex, la entidad con el mayor padrón electoral de la Federación.
Mientras que al interior de los partidos tradicionales se debate sobre la designación de sus candidatos a la presidencia de la República, López Obrador continúa su campaña que inició desde el año 2000 siendo Jefe de Gobierno del D.F., pero ahora con el financiamiento público de 400 millones de pesos anuales de su partido y con más de 2 millones de spots gratuitos en radio y televisión hace campaña anticipada como candidato a la Presidencia.
Es clara la inequidad en la contienda que oficialmente todavía no se inicia ya que AMLO, como dueño absoluto de Morena, se ha aprovechado de un vacío de la ley para hacer trampa al promoverse como el eterno candidato con recursos públicos y fuera del calendario de las campañas presidenciales. Su ventaja es grande frente a sus aún desconocidos contendientes en la carrera por la primera magistratura del país.
Una historia paradigmática del temperamento abusivo de AMLO es aquél momento en que obliga a “Juanito” a renunciar a la Jefatura de Iztapalapa (un cargo de elección popular) para imponer a su incondicional Clara Brugada. Un patético fraude a la ley y al ciudadano.