Atacan a tiros a familia en Puebla; 9 muertos
Ajuste de cuentas entre grupos delictivos y el robo de gasolina, entre las principales líneas de investigación, informa Antonio Gali
Un total de nueve habitantes del municipio de Huehuetlán El Grande, Puebla, fueron asesinados en un ataque a una familia por parte de un grupo delictivo que irrumpió en un domicilio los últimos minutos del domingo y las primeras horas de ayer.
Tres cuerpos fueron encontrados dentro de una vivienda, además, se reportó la ejecución del comandante de la policía, quien fue asesinado a las afueras del domicilio de una de las víctimas.
Otras cinco personas fueron halladas sin vida, con tiro de gracia y calcinadas, en un paraje de la carretera Puebla-Cuautinchán.
De acuerdo con vecinos de la zona, la noche del domingo se registró una balacera en la que estaría involucrado el grupo delictivo encabezado por Pedro “N”,
ElCuije, presunto responsable de extorsionar a comerciantes del poblado.
Entre las personas fallecidas se encuentran una mujer y un menor de edad. En el enfrentamiento un regidor y un policía resultaron heridos.
Según Seguridad Pública, algunos de los homicidas portaban capuchas y armas de grueso calibre.
Agentes ministeriales y elementos de la Policía Federal, acudieron al municipio con el objetivo de restablecer el orden y la seguridad en la región e iniciar las diligencias en torno a los homicidios.
Tras los hechos, el gobernador Antonio Gali informó que una de las líneas de investigación es el ajuste de cuentas entre grupos delictivos y agregó que también se indaga la posibilidad de que personas dedicadas al robo de combustible estén implicadas.
Gali dio a conocer que personal de las áreas de seguridad acudieron a la zona para iniciar las indagatorias.
“Estamos en investigación. Desde muy temprano me avisaron el secretario de Seguridad Pública y el de Gobierno”.
Torturados
Cerca del mediodía de ayer, se reportó la presencia de cadáveres a un costado de la carretera Puebla-Cuautinchán. Los cuerpos presentaban huellas de tortura y estaban calcinados.
Algunos de los restos encontrados portaban credenciales que los acreditaban como pobladores de Huehuetlán.
Familiares y habitantes del municipio acudieron al lugar del hallazgo; sin embargo, no pudieron reconocer los cuerpos ya que el personal de la fi scalía general del estado acordonó la zona. Los habitantes explicaron que el número de muertos y algunas de las características coinciden con sus parientes.