Agentes de vialidad y el metro bus
Las actuales obras que se están realizando sobre el boulevard Revolución aquí en Torreón, han provocado que la vialidad en ciertos cruceros se vuelva un caos, sobre todo en horas pico. La gran mayoría de la gente acepta que una obra de esa magnitud conlleva ciertos inconvenientes viales, cuando se está haciendo.
Los que llevan parte más difícil de esta obra son los agentes de vialidad, que como parte de su trabajo deben realizar, aun con temperaturas arriba de 40º grados, con un sol a plomo, laboran estoicamente, pero también estos días hemos tenido lluvias que hacen aún más difícil su labor de vialidad, pues al final de su jornada terminan empapados y salpicados de fango de los vehículos circulantes.
Pero no solo las inclemencias del tiempo deben soportar los agentes de vialidad, también algunos (Pocos) conductores se molestan sobremanera, cuando no alcanzan a pasar y son detenidos unos momentos, para que fluya la circulación, insultándoles y hasta retándolos a liarse a golpes, por haber osado el agente de vialidad ordenarles que detuvieran su marcha unos segundos.
Algunos de estos conductores, -hombres y mujeres- tripulan vehículos de reciente modelo y piensan que por eso, se les debe dar preferencia en todo, y si no es así, sale el “HULK” que llevan dentro. Gritan, manotean, vociferan, patalean, (show vial completo) y hasta amenazan al agente de vialidad con destituirlo. Claro, esos mismos conductores, prepotentes y majaderos, al ingresar al territorio de los EE.UU, en automático se vuelven en unos excelentes ciudadanos, respetuosos de la ley y de sus autoridades, aun con sus vehículos de reciente modelo o hasta de lujo.
Sabemos que México no es Estados Unidos, pero me atrevo a decir, que nuestro país tiene más leyes y reglamentos que el vecino país, empezando con la Constitución mexicana que cuenta con 136 artículos y la Americana, solo ¡¡¡siete!!! La gran diferencia es que en EE.UU, si se respeta las leyes y a sus autoridades y aquí en todo México el pretexto es que no existe suficiente presupuesto para proceder en consecuencia.
Pero la realidad es que las autoridades en turno no actúan por miedo al costo político, no solo en multas de vialidad, sino en la gran mayoría de los reglamentos que son letra muerta. Los países del primer mundo se enfocan principalmente en faltas administrativas, mismas que no son delitos, se subsanan con multas o trabajos comunitarios. El que es honesto en lo poco, es honesto en lo mucho. Si seguimos siendo tolerantes a las faltas administrativas, el siguiente paso serán delitos.