Guerra de nervios II
E l PAN, con mayor “timing” político después de las elecciones, presentó ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) una queja contra el gobernador Rubén Moreira, el procurador Ramos Gloria y el Ministerio Público por actuar “de manera ilegal en las indagatorias”. Eduardo Aguilar, representante de Acción Nacional ante el INE, denunció “cateos (…) persecución política (y) citatorios muy graves. (…) A militantes del PAN les están pidiendo que acudan a declarar a la Procuraduría cuando además este expediente ya lo tiene un juez y la Procuraduría no tendría por qué conocerlo”.
Según Aguilar, en Coahuila han violado más de 20 artículos de la Constitución, entre ellos los derechos de asociación política, a la libertad de expresión y el derecho de reunión. “Están haciendo una persecución política como en los años 60”, acusa.
La queja, explicó Guillermo Anaya, “(es) por todos los actos autoritarios que ha venido realizando el gobierno de Rubén Moreira (…). Han sido atropellados nuestros derechos con cateos, con intimidaciones”. El caso se presentará también ante la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos y otros organismos internacionales “para denunciar el auténtico estado represor que están viviendo los coahuilenses y los simpatizantes de un proyecto democrático”, informó.
Para aumentar la tensión en esta guerra de nervios, el vocero de Los Pinos, Eduardo Sánchez, publicó en su cuenta de Twitter fotografías del presidente Peña con Alfredo del Mazo (PRI) y Antonio Chavarría (PAN), gobernadores electos de Estado de México y Nayarit, respectivamente. El mensaje ( la forma es fondo) puso los pelos de punta al priismo de Coahuila y dio pábulo a mil interpretaciones. En realidad, solo a una. ¿Cuándo será la foto con Miguel Riquelme? También él es gobernador electo, ¿o no? La estampa de Peña y Riquelme en el Palacio de los Deportes, en la asamblea del PRI, no vale lo mismo que una en la residencia oficial.