A Carmen, en su primer no cumpleaños
eis pequeños spots, disfrazados de antiguas candilejas, iluminan el minúsculo escenario del Café K- OZ Foro cultural, que apenas se asoma en la calle de Séneca, a espaldas del llamado Palacio de los Palacios por los rumbos de Polanco.
El escenario debe medir no más de 3 por 1.5 metros; y sin embargo lo que sucede en él es grande; tan grande como solo puede serlo la magia del teatro.
Me tocó conocer este espacio con la excelente puesta en escena La piedra oscura. Excelente no solo por el texto, sino por el muy cuidado montaje, que aprovecha al máximo el espacio mínimo, el brillante trabajo de dirección, amén del muy buen desempeño actoral.
Escrita por Alberto Conejero, una de las figuras emergentes de la dramaturgia española, Lapiedra
oscura es una pieza que como bien se resume en la red “aborda la persistencia del ser, tomando como marco de fondo la relación entre Federico García Lorca y el que fuera su último compañero, Rafael Rodríguez Rapún”.
Una treintena de butacas, ubicada en el primer piso del pequeño local, recibe a los espectadores que desde hace semanas agotan cada función de
La piedra oscura, montaje que recibe al público con sus tres intérpretes ya en escena, como si fuese una pintura viviente. Uno a uno (los ya citados Lorca y Rafael, así como Sebastián, el soldado que vigila a este último) va cobrando vida y entretejen una historia que a lo largo de casi 90 minutos atrapa la atención por su fuerza, su buena manufactura y su belleza poética.
No extraña encontrarse con algo tan bien montado cuando se lee en el programa de mano que la dirección y el espacio escénico son responsabilidad de Sebastián Sánchez Amunátegui, sin duda uno de los mejores en esta actividad en este momento.
A ello hay que sumar el trabajo de Tareke Ortiz en la música original, a Karim Martínez en la pintura escénica, que crea un espacio muy atractivo en ese mínimo espacio físico.
Y, por supuesto, aplauso para los muy actores. El mismo Karim en el personaje de Rafael; a Jonathan Persan (quien alterna con José Manuel Rincón en el rol nada fácil de Sebastián), y a Jhovanni Raga (que alterna con Daniel Fuentes Lobo) como Federico.
Café K-OZ tiene una agenda ocupada, que incluye obras como Lo que se ve desde el cielo (martes), o Días de verano ( jueves y viernes); y por supuesto
La piedra oscura (sábados y domingos) que prolonga su temporada hasta octubre, y que no debe perderse.