Una carrera para la cultura
En las campañas de promoción del encuentro deportivo se ha dado énfasis en los valores artísticos del recorrido, como monumentos y sitios históricos
En un comentario al artículo “México 68”, relativo al diseño gráfico utilizado en los Juegos Olímpicos de 1968, Ricardo Bazoli escribe: “Es increíble advertir lo bien que el diseño de (Lance) Wyman ha envejecido. Como habitante de la Ciudad de México y diseñador, siempre persigo como estándares su estilo de abstracción y su refinamiento”.
Tan fresco se ha conservado el trabajo de Wyman que, casi medio siglo después, el Maratón de la Ciudad de México Telcel ha recurrido a su arte para reciclarlo como signo distintivo de la carrera de 42 kilómetros. Jyasu Macías Covarrubias, director de Comunicación y Mercadotecnia del Instituto del Deporte de la Ciudad de México (Indeporte), dijo en entrevista que esta tipo- grafía “es el eje rector de toda la campaña que estamos integrando desde 2013 para llegar, en 2018, a los 50 años de la celebración de México 68”.
Como si echáramos un viaje en el tiempo, advertimos que carteles, volantes, publicidades, señalizaciones y todo tipo de parafernalia que tiene que ver con el maratón parte de la tipografía de Wyman. Los organizadores cuentan con los permisos necesarios para utilizar la tipografía y los diseños, que tienen un peso relevante en las medallas que se han entregado a los ganadores de la justa deportiva desde 2013. Ese año la presea estuvo conformada por la letra M, como la que el diseñador estadunidense utilizó hace 49 años en el logotipo de los Juegos Olímpicos, y que tiene que ver con “México” y “maratón”.
Marcela Guerrero, coordinadora de Nuevas Tecnologías de la Dirección de Comunicación del Indeporte, mencionó que la edición 35 del encuentro deportivo “se enfocó en la letra C, de cultura. Desde 2013 veníamos trabajando las temáticas que conforman la palabra México, cuando usamos la M. En 2014 fue la E, que tenía que ver con ecología y medio ambiente; la X se usó en 2015 para englobar la música, mientras que en 2016 fue la I, para designar innovación”.
Macías Covarrubias enfatizó que en “la promoción empezamos a enfocarnos en lo que tratábamos de transmitir relativo a la cultura. Veíamos que podíamos hablar de infinidad de cosas, desde las culturas prehispánicas. De hecho incorporamos a nuestras campañas imágenes distintivas, como la Piedra del Sol o Quetzalcóatl, como elementos gráficos”.
El funcionario advirtió que en las campañas de promoción se puso énfasis en los valores culturales de cada barrio de la ruta, como “son monumentos y sitios históricos. Resaltamos esto en una campaña focalizada en seis barrios: Zócalo, Polanco, Roma-Condesa, Nápoles, San Ángel y Ciudad Universitaria, y a cada uno le dimos su identidad”.
En las redes sociales se hizo una campaña con el hashtag # deaquisoy para promover el orgullo de pertenecer a las zonas por las que pasará el maratón. “El maratón sirve de pretexto para regresar a nuestros antepasados y repasar la historia que todos tenemos con la Ciudad de México. A lo largo del recorrido habrá actividades culturales, algunas de ellas organizadas por las marcas que participan en la promoción de la carrera, así como por instituciones privadas y gubernamentales”.
Este año, el Maratón de la Ciudad de México Telcel emulará la salida de la carrera olímpica de México 68, por lo que la ruta sufrirá modificaciones. La salida será en el Zócalo, lo cual, dicen los organizadores en un comunicado, “será una variable importante para mostrar la belleza del Centro Histórico de la Ciudad de México (...) Sería de esta forma la primera ocasión, después de México 68, que iniciará en el Zócalo y terminará en el Estadio Olímpico”.