50 mineros fallecen en Hidalgo al estallar dinamita
La tragedia de los mineros en México siempre ha sido brutal, y olvidada. Por un descuido, unas 87 cajas de dinamita estallaron en la Mina Rosario, que se ubica muy cercana de la ciudad de Pachuca
Eso ocurrió cuando los explosivos entraban a la boca de la mina. Volaron casas y quedaron atrapados miles de trabajadores. Los primeros reportes indicaban que habían muerto al menos 50 mineros, cuyos cadáveres habían sido rescatados.
La situación causó consternación y los habitantes de Pachuca se volcaron al lugar del accidente para tratar de ayudar a las personas que estaban atrapadas por montones de tierra en el socavón.
En tanto, a bordo del tren presidencial viajaba ya el presidente Carranza; no se sabía si venía a Torreón pero su viaje estaba programado para visitar su natal Cuatrociénegas, y aunque no quisiera debía llegar a Saltillo.
De última hora, mientras Carranza viajaba, se afirmaba que estaba en ciernes una crisis ministerial de renuncia masiva pero por ahí de la semana que seguía, ya que las últimas iniciativas enviadas por el presidente habían sido rechazadas en las cámaras.
Continuaban los problemas entre EU y México. Y a nivel internacional se veía venir una crisis muy grave. Francia, Italia, EU e Inglaterra al parecer habían deliberado sobre el futuro mexicano, claro, sin preguntar, y todo porque la nueva Constitución pedía requisar empresas petroleras. También se comprometían a investigar los asuntos mexicanos.
En las conferencias de paz, se hacía una solicitud que desde luego nadie iba a acatar. Se trataba de prohibir la fabricación de alcohol y armamento en el mundo. Combinación muy fea que sigue funcionando para el mal.
Otra explosión mortal ocurrió en Budapest. Los rumanos que habían ingresado de manera heroica a Hungría para presuntamente liberar a la población del dictador Bela Kun, fueron los responsables de prender fuego en muchos lugares del país invadido y los aliados muy angustiados. Lo cierto era que las noticias eran contradictorias.